La Cata del Vino de Moriles reinventa su esencia ante la pandemia y la crisis

Entrar hasta las entrañas de los viñedos para conocer cómo y dónde se producen sus caldos.En total son ocho las firmas que participan en la cata. Lagares como Casablanca, Benavides o Los Frailes. Bodegas de renombre como El Monte, San Pablo, Doblas o San Jerónimo.

Y, además, la cooperativa Virgen del Rosario. Y no hay que olvidar que tanto lagares como bodegas se vieron inmersos con la llegada de la pandemia en una crisis sin precedentes ya que tanto la hostelería como los festejos, principales salidas para el vino de la tierra, cerraron sus puertas.

No obstante, con esfuerzo y reinvención, han sabido capotear el duro temporal que ahora tiene otro peligro, la sequía que azota nuestros campos. Para Antonio López, gerente de bodegas El Monte, ha sido importante durante la pandemia conocer de cerca al cliente. Y es que esta firma, enclavada en Moriles Altos, ha sabido convertir en una auténtica carta de presentación para una clientela cada vez más fiel el conocido Fino Cebolla. Sin olvidar que cuentan con uno de los finos más demandados entre los consumidores cordobeses, Los Naranjos.

Y es que López tiene claro que «hay que mantener un vínculo con el cliente final para que éste conozca de dónde viene el vino que consume».En los últimos tiempos esta bodega ha dado paso a su cuarta generación y, quizá por eso, no para de innovar. Así su línea Ximenium, presentada en plena pandemia, es una gama de cinco vinos que ponen en valor técnicas únicas como la vendimia nocturna de recolección manual.

Por su parte David Ruiz, del lagar Casablanca que produce un reconocido Pedro Ximénez variedad de tinaja, se muestra preocupado porque la producción por culpa de la sequía este año se ha reducido hasta un cincuenta por ciento. También afirma que se mantuvieron en pie en estos años poniendo en práctica nuevas fórmulas como llevar el vino hasta la casa del cliente particular. También Bodegas Doblas puso en marcha una campaña para vender el vino a domicilio.

Según Antonio Doblas tuvo mucho éxito tanto en Córdoba como en otras provincias.La mayoría también opina que la subida de precios en las materias primas con las que se trabaja se está convirtiendo en un obstáculo para mantener los precios.Y no se puede olvidar la apuesta por el enoturismo que están haciendo lagares y bodegas para atraer al turista. Iniciativas como el actual formato de cata o las visitas guiadas durante todo el año son otro aliciente para el negocio.