Calle Cabezas: la lujosa carrera hotelera de los cien metros

La galería de ilustres en tan corta distancia pesa: Góngora, Leonor Guzmán, Salvador Pérez (alcalde de Córdoba), Marqueses del Carpio, doña Muña, Condes de Zamora de Riofrío... y los Siete Infantes de Lara. Reina un silencio que parece una forma de homenaje a la memoria.

Pero estos cien metros se han convertido en el tartán simbólico de una carrera exprés por la apertura de hoteles de lujo, de los llamado 'boutique', como banco de pruebas de un segmento de alto poder adquisitivo que anhela una ciudad en la que las estancias son cortas y los gastos medios de los turistas no se estiran con facilidad.

Pese a la pandemia, no se han truncado ni las ideas ni los proyectos. Otra cosa son los ritmos. Y la nueva etapa de recesión que se vive siembra otra incógnita sobre la viabilidad futura de gruesas iniciativas. Aunque los hechos son más tozudos y parecen apoyarse en el tradicional principio de la tortuga: sin prisa pero sin pausa.

Una muestra clara de ello es la reciente autorización por parte de la Comisión Provincial de Patrimonio del proyecto básico para convertir la vieja casa de los Condes de Zamora de Riofrío (números 6 y 4) en un hotel de cuatro estrellas. Una iniciativa de la empresa sevillana Argeno Asesores de la mano de un arquitecto cordobés que ya cursó el primer trámite en 2019 y ha pasado más de tres años de modificaciones puntuales para preservar ciertas exigencias de Cultura hasta que hace unas semanas ha logrado el visto bueno.

El material a emplear en la fachada o los aparatos de aire acondicionado bajo cubierta (y no encima) eran algunos de los reparos. Finalmente, el hotel tendrá 22 habitaciones sobre 2.500 metros cuadrados construidos en una casa solariega del siglo XVII cuyo penúltimo propietario fue el mismísimo Rafael Gómez. Dispone de cinco patios (dos de ellos grandes), jardín y zona de piscina interior.

Ahora toca definir el proyecto definitivo y pedir licencia para construir un establecimiento que sigue el patrón: boutique, estilo, sensaciones y estancias placenteras en patios y muros con historia. Argeno no deja de ser un operador promotor que buscará, sin duda alguna, el acuerdo con una cadena del sector que se haga cargo de la explotación del mismo . La inversión que consta en su proyecto, al que ha tenido acceso ABC, se eleva a 1,6 millones, partida que se antoja corta para una empresa siempre ambiciosa.

Unos cuantos meses atrás, el propietario de la Casa de las Cabezas desde 2006, el notario Manuel Ramos, alcanzó un acuerdo con sus vecinos del hotel Madinat, de cuatro estrellas, para gestionar lo que fue casa-museo de las Cabezas como un 'superlujo' de seis suites (de hasta 70 metros cuadrados alguna).

Bajo la fórmula de 'Casas Históricas Abiertas', el inmueble que acoge la callejuela donde cuenta la leyenda que colgaron las cabezas de los Infantes de Lara ha tenido en este tiempo una respuesta más que satisfactoria. Clientes de alto poder adquisitivo, reuniones familiares o de empresa en un ambiente selecto y exclusivo -las estancias funcionan casi como apartamentos independientes- a unos precios exigentes pero que se corresponden con una oferta complementaria a la que el hotel de los cooperativistas Madinat SCA ofertan desde 2016 con notable éxito.

Este palecete modernista que fue casa del alcalde Salvador Pérez tiene 11 habitaciones, sigue ese dibujo exquisito de rehabilitar espacios con encanto y mucha historia y ofrecer servicios diferenciadores. Vista increíble de la Mezquita-Catedral o incluso baños árabes propios y una decoración muy cuidada.

En un momento en que se sigue echando en falta el potencial de turismo extranjero -recordar que Córdoba es una de las ciudades a las que más le está costando recuperar el peso preCovid, que llegó incluso a la mitad de todo el pastel turístico-. Aún así, la clientela veraniega que ha tenido esta nueva fórmula de la Casa de las Cabezas podría situarse en el 'mapa mundi' desde Miami hasta Oriente Próximo pasando por Europa.

Es en este caladero donde la socimi Millenium Hospitality Real Estate penetró allá por 2020 con la compra de tres, que luego fueron cuatro, casas y solares, en la misma calle Cabezas y su prolongación casi en una manzana completa por la perpendicular de Caldereros (en el número 3, la antigua Casa de los Jurado, del siglo XVII). Más de 3,2 millones ha sido la inversión en esas adquisiciones.

Sus impulsores, que dicen negociar con tres cadenas muy importantes (suelen trabajar con Radisson, Nobu y Marriot), están definiendo por ahora el proyecto que presentarán tanto a Cultura como a la Gerencia de Urbanismo para obtener licencia. han ejecutado ya algunas catas arqueológicas previas, si bien, por ahora, no se ha vuelto a ver movimiento en las parcelas. La última adquirida, un pequeño solar limítrofe a otra pequeña callejuela, pudiera albergar restos islámicos.

Los números que difunde en sus balances últimos (primer semestre de 2022) esta socimi han prolongado la estimación de apertura a finales de 2024 con una previsión de 53 habitaciones bajo una calificación de cinco estrellas, en poco más de 3.000 metros cuadrados edificados y la denominación de 'Los Palacetes de Córdoba'.

La misma duda flota ahora mismo en el ambiente: ¿cómo impactará la actual crisis en el proyecto hotelero más simbólico que hay en Córdoba ahora mismo? Los números de esta empresa son abrumadores. En cartera tiene edificios para convertirlos en hoteles de lujo por valor de 476 millones de euros y una caja neta de 79 millones al cierre de junio de este año. En total, oncve ubicaciones con 1.108 habitaciones repartidas entre Madrid, Alicante, Bilbao, San Sebastián, Sevilla, Cádiz y Córdoba.

El encanto de esta calle, pues, no solo rezuma historia, misterio y leyendas, sino atractivo para un turismo de lujo que de consolidarse estas dos nuevas iniciativas, además de las otras ya en marcha, armaría un nicho de poco más de 90 plazas en hoteles de cinco y cuatro estrellas.

Buscar la rentabilidad tras unas importantes inversiones hechas o proyectadas, que se topan con la rehabilitación de espacios históricos, pasa, obviamente, por unos precios que pasan el umbral medio y que van dirigidos a un cliente exigente y sin reparos a la hora de pagar una noche por varios centenares de euros o hasta más de mil euros por un fin de semana, según qué temporada sea.

Queda una última y codiciada pieza: la Casa de los Marqueses del Carpio, una amplia manzana de parcelas con fachada a la calle San Fernando, pero con su torreón protegido inserto en el paisaje urbano de la calle Cabezas pasto de los rumores y los ojos avizores.

En manos, actualmente, de la familia Herruzo, una de las casas señoriales más bellas de la ciudad busca su propio destino. No le faltan ofertas -no contundentes-. Mucho se habló en los mentideros del sector de Millenium y su interés. Nada cuajó. Ahora los focos se ponen en una posible iniciativa para poder ser visitada por el público, todavía muy verde. Sin duda, la guinda de un pastel que promete, por ahora, muchas expectativas.