Batalla por Córdoba: Bellido y la mayoría absoluta sin Vox ni el bloque radical

Pero el aspirante del PP quiere una victoria sin ambages ni servidumbres. No quiere a Vox en el gobierno ni, por supuesto, dar pábulo al bloque de izquierdas radical (PSOE-IU) que en la última década y media ha ido frenando la estancia larga de los populares en el Ayuntamiento. Los sondeos le sitúan al borde de la mayoría absoluta (15 concejales de 29). Y, así, el discurso recuerda al de Juanma Moreno hace menos de un año, apelando al socialista moderado al que la espada de Damocles de Sánchez le pesa como una losa. Sólo por ahí y la participación (acabada la Feria en la jornada de reflexión) puede llegar una mayoría holgada que ya consiguió José Antonio Nieto en la oleada de 2011 contra el 'zapaterismo'.

Hay por tanto tres escenarios posibles en Córdoba: Bellido con mayoría absoluta, con un cogobierno con Vox (salvo que se quede a un concejal de los quince e intente un acuerdo desde fuera) y la suma de los socialistas y la amalgama de siglas de la izquierda radical en Hacemos Córdoba (IU, Podemos, Verdes, Más País,...), la primera vez que opta a la Alcaldía en ese traje, dejando atrás la pesada historia del PCE e IU en la ciudad que gobernó Anguita.

El PSOE ha elegido a un veterano de la política local que ya sufrió Rosa Aguilar en la oposición pero que encontró acomodo en el Congreso de los Diputados en la génesis y maduración del 'sanchismo'. Antonio Hurtado se marca como reto mantener los ocho concejales que legó la anterior alcaldesa cuando perdió el bastón de mando. Bajar de ahí, un fracaso. Apuntalar el contexto nacional con propuestas que suenan moderadas pero se topan con sonados fracasos de las etapas en que los socialistas tocaron poder en la ciudad.

Si la coalición de izquierdas superase al PSOE, sería una hecatombe, de mayores magnitudes si una mayoría absoluta de Bellido abre la puerta del gobierno de la Diputación de Córdoba al PP -único bastión que le queda a los pupilos de Juan Espadas-.

La debacle de Ciudadanos, que ostenta cinco ediles y ha cogobernado con el PP, parece una evidencia. Su alforja podría ir al completo al PP o casi toda. No se espera que saque ni un concejal. Y Vox -que presenta a la única mujer aspirante- es una incógnita. Apostó por una nueva cabeza de cartel afin a Abascal y los comienzos de la formación y se mueve en una horquilla de posibilidades variada: apenas un empujón o un salto de dos a cuatro concejales. Quiere cogobernar con el PP si le salen las cuentas.

En este escenario, José María Bellido -valor en alza del equipo de Juanma Moreno y Feijóo- vende una gestión muy aseada, no sólo por el logro de la Base Logística, sino por haber desatascado proyectos y equipamientos de alcaldes anteriores y orientar a la ciudad hacia el escaparate de los grandes eventos, zonas verdes y la seguridad jurídica y confianza al inversor externo.