Primera plana
Presupuestos sin alta velocidad
No todo está precisamente encarrilado en las cuentas del Estado
El Gobierno incrementa las inversiones en Córdoba un 20% hasta 169 millones
La inversión del Gobierno en la provincia en 2023 ascenderá a 169 millones —un 20% más que en 2022— según el borrador de Presupuestos del Estado, con el gasto en ferrocarril como locomotora. Especial velocidad imprime a las partidas para ... Media Distancia, con la promesa del Ejecutivo de implantar hasta 19 frecuencias en el eje Villa del Río-Palma del Río pendiente de recibir luz verde. Porque el desembolso en esta materia saltará de cuatro a casi 40 millones. En este campo, se consignan más de 12 millones para actuaciones en logística. Son fondos muy importantes porque el transporte de mercancías es una de las grandes vías por las que debe circular el desarrollo de nuestra tierra.
Pero no todo está precisamente encarrilado en las cuentas del Estado. Al mismo ritmo que si fueran montados en aquel Tren Botijo que a principios del siglo XX llevaba a nuestros antepasados a las playas de Málaga, se mueven importantes proyectos de carreteras: la reforma de la A-4 a su paso por Córdoba; la nueva carretera de Badajoz a Granada o el segundo tramo de la Variante Oeste. De este último, hay que destacar que, si no se ejecuta, el potencial logístico de la capital no podrá alcanzar su velocidad máxima.
No es éste el único elemento negativo en los Presupuestos. La inversión por habitante aquí será de 218 euros. Se queda un 23% por debajo de la ratio nacional (284) y esa cifra, además, es inferior en un 19,8% a la andaluza (272). Los reseñados 169 millones que el Gobierno destinará hacen que Córdoba no circule precisamente como un AVE en la clasificación regional: sólo Jaén recibirá una cantidad más baja (69). Si la labor de revisor la hacemos con el parámetro del desembolso por ciudadano, somos el antepenúltimo territorio de la región.
Del Ejecutivo más progresista de todos los tiempos y del mundo mundial, se espera que le eche más combustible a los enclaves que tienen más necesidad de ello. Pero los adjetivos calificativos molones descarrilan con la realidad. Y ésta es que nuestra provincia no ve acelerarse sus inversiones como debiera, dado que es una habitual en los vagones de cola de los indicadores económicos nacionales.
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