El Ayuntamiento de Córdoba triplicará la inversión en toldos y los extenderá por la ciudad

En el primer campo, la Delegación de Infraestructuras ha dado pasos importantes en el verano en curso, que se resumen en la inversión de en torno a 95.000 euros en la colocación de parasoles en el Centro de la ciudad -el año pasado no pudieron instalarse por desajustes administrativos y por desacuerdos con los vecinos en cuyos edificios habían de anclarse las estructuras- y en la habilitación de tres zonas cubiertas con las carpas que se usan en el recinto de El Arenal durante la celebración de la Feria de Nuestra Señora de la Salud, y que son el acceso principal al Alcázar de los Reyes Cristianos, Puerta Gallegos y la explanada que antecede a la estación del AVE.

Esta última experiencia -que se desarrolla estos julio, agosto y septiembre de forma piloto- es la piedra de toque sobre la que la Delegación de Infraestructuras está levantando un proyecto de más enjundia. El responsable del citado departamento municipal, Miguel Ruiz Madruga, avanzó ayer a ABC que técnicos de su negociado están redactando un informe que determinará qué zonas de la ciudad son susceptibles de acoger estos parasoles portátiles. «Los plazos con los que trabajamos es que el documento esté listo este mes de septiembre, y que ahí estén descritos los lugares en los que se pueden colocar los toldos en el verano de 2025», declaró el edil.

¿Cuáles son las prioridades? En principio, los técnicos del Ayuntamiento están analizando los pasos de peatones más transitados y que no tienen apenas protección de la sombra natural o de arboleda. Ruiz Madruga se extendió con que, «además, las cuatro zonas comerciales de la ciudad [o centros comerciales abiertos] están en nuestra mente», así como las calles de afluencia importante de ciudadanos que, por sus características, resulten impracticables para el anclaje de los toldos tradicionales, y que por lo tanto sean idóneas para que operen los ya citados que se usan en la Feria de Mayo.

El presupuesto estimado que maneja el Consistorio para reforzar estos sencillos dispositivos contra el calor a partir del verano de 2025 es de 300.000 euros, aunque la cantidad puede variar.

¿Y de qué depende? De la concurrencia de las empresas privadas, con las que el Ayuntamiento ya está contactando para estudiar fórmulas de colaboración: se trataría de que las firmas usaran estos toldos como reclamos publicitarios con serigrafías estampadas en las telas, una idea que ha funcionado con éxito en Sevilla, Málaga y Granada y de la que el Consistorio cordobés ha tomado nota.

El interés que se está tomando la Delegación de Infraestructuras en el asunto no es menor, ya que su intención es triplicar entre este verano y el que viene la cantidad desembolsada para la instalación de parasoles: de los 95.000 euros actuales se pasaría a los 300.000 del estío de 2025. Y la información con la que cuenta ya el negociado que dirige Ruiz Madruga es positiva, porque le consta que ya existen firmas interesadas en anunciarse en los toldos portátiles los próximos julio, agosto y septiembre. «Hay empresas que nos han llamado ya porque quieren que contemos con ellas», recalca el concejal.

El otro gran proyecto de entoldado en el que está trabajando el Ayuntamiento es el que va a desarrollar en los patios de colegios. Ejecutará una primera fase de instalación de parasoles en 34 centros -a ellos se suma el que colocó en abril como experiencia piloto en el CEIP Vista Alegre-. El presupuesto previsto para acometer esta actuación es de 825.714 euros.

El edil de Infraestructuras explica que la licitación de esta intervención está pendiente de subirse a la plataforma de contratación, lo que sucederá en los próximos tres días. A partir de ahí, sigue Ruiz Madruga, habrá que esperar a lo que tarde en resolverse el concurso. «Imagino que irá rápido», añade. Tras recordar que en los procesos públicos de selección de empresas siempre pueden surgir elementos que los retrase, sí apunta a que esperan para «finales de septiembre» estar instalando los parasoles.

Este horizonte temporal encajaría con lo señalado por el alcalde, José María Bellido, en junio tras el retraso que se produjo en el primer calendario dado para este proyecto: planteó que se dispusiera de los toldos para mayo, con lo que podrían servir para aliviar las temperaturas de final de curso. Tras producirse la demora, el regidor apuntó a que quería tener estas protecciones contra el calor «para el otoño; o sea, que, para la vuelta del verano, se puedan instalar».

El primer edil, ademas, reivindicó la actuación del gobierno que dirige. «Ahora, tenemos un horizonte de actuaciones, mientras que en 50, 60 ó 70 años los colegios nunca han tenido parasoles», aseguró. Y a ello añadió que el Consistorio, con él al frente, había climatizado ya una veintena de centros educativos.

En la documentación del Ayuntamiento para impulsar este proceso de contratación, se indica que este programa busca instalar toldos de «tipo vela» en colegios para mejorar su protección frente a las altas temperaturas que «se experimentan en sus patios». Con ello, el Consistorio pretende «mejorar sus parámetros climáticos y la calidad de vida» del alumnado y del profesorado.

El gobierno municipal ya ha mostrado su intención de llevar los parasoles, además de a estos 34 centros, a otros -Capitulares es el responsable del mantenimiento de 73 colegios de la capital-. Eso sí, hay que tener en cuenta que hay equipamientos educativos que ya cuentan con este tipo de protección y otros donde la instalación de los parasoles implicaría ocupar parte del espacio donde los niños hacen deporte. Por ello, el Ayuntamiento quiere consultar con la Junta, la dirección y el AMPA de cada centro educativo que esté en esa circunstancia para ver si quiere colocar los parasoles o no.

«Una vez que estén instalados los toldos de la primera fase, empezaremos la negociación con los otros colegios. No sabemos en cuántos se pondrán. Todo dependerá de lo que quieran los centros», indica Ruiz Madruga.

Esta política de ampliación de las zonas con sombra se completa con el Plan Director de Arboleda, que el Ayuntamiento contrató a comienzos del pasado mes de julio. Este plan ha sido encargado a la empresa «Árbol, investigación y gestión S.L.» más conocida por 'Doctor árbol' por un importe de unos 90.000 euros. Tiene un plazo de ejecución de ocho meses.

En este sentido, el delegado de Infraestructuras señala que «empezaremos por un diagnóstico, ya avanzamos algo al respecto, provocado por las tres tormentas que nos dejó bastante tocada nuestra masa arbórea, pero ahora lo haremos con más detalle, así como un análisis de nuestra gestión y de necesidades de medios; es decir, si tenemos la capacidad para cumplir el objetivo de cuidar esos más de 90.000 árboles que tenemos y propuestas de mejora en esa gestión. Luego, veremos el crecimiento de los próximos años y un un plan de actuación. Hay que verqué tipo de árboles se van a plantar, en qué número, en qué zonas y las adaptaciones a las nuevas necesidades climáticas».

Uno de los objetivos, en el día a día de la ciudad, es precisamente, a juicio del responsable de Parques y Jardines, «la necesidad de plantar más árboles de los que habíamos plantado habitualmente». «En el ejercicio 2023-2024, hemos plantado 1.341 árboles -entre noviembre y marzo-. Eso ha mejorado el porcentaje de plantación ordinario en más de un 30 por ciento. Es verdad que sigue siendo insuficiente, pero el saldo es positivo, aun perdiendo bastante arboleda por culpa de los temporales», reflexiona el concejal de Infraestructuras.

El Ayuntamiento de la capital tiene el objetivo de superar esas cifras en 2024-2025 con la plantación de 2.000 árboles, en este caso serían 1.400 dentro de un plan ordinario y 600 árboles más de un programa extraordinario y que cuenta con un presupuesto de en torno a los 114.000 euros.