El auge de los apartamentos turísticos se expande ya por Ciudad Jardín y La Viñuela

El fenómeno apareció primero en zonas monumentales y luego que tuvieran comercio, pero languidecieron en ese aspecto hace tiempo. Buenos ejemplos fuerondiversas calles de Sagunto o el Arcángel. Pero la tendencia se está extendiendo por aquellos lugares que mantienen una buena salud comercial, ligada, precisamente, a los conocidos como centros comerciales abiertos. La Viñuela o Ciudad Jardín son dos claros exponentes.

Un fenómeno al alza, como puede comprobarse con sólo darse una vuelta por estos barrios. En cualquier caso se trata de una parte de un movimiento económico muchísimo mayor que arrastran los pisos turísticos en apabullante competencia directa, e 'in crescendo', de los hoteles. En ese ámbito, y ya en el año 2022, la suma de pisos turísticos y complejos de apartamentos turísticos contaban con más plazas que los hoteles de la ciudad, entendiendo como plazas las habitaciones ofrecidas (hay pisos turísticos que no se alquilan como una unidad, sino por habitaciones).

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Por poner en perspectiva el estado de las cosas, actualmente existen en Córdoba capital 2.651 pisos turísticos y 47 apartamentos turísticos, según indica el registro de turismo de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía. Teniendo en cuenta sólo los primeros, ya estaríamos hablando del equivalente a más de 6.000 habitaciones. Por parte de los apartamentos, y según cifras recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE), las pernoctaciones en apartamentos turísticos subieron un 20% en febrero con respecto al año anterior, siendo este mes temporada baja. Ésta es, grosso modo, la magnitud de la situación, quedando fuera determinados alojamientos considerados rurales, de los que también existen en Córdoba dada la extensión de su término municipal.

Al abordar la cuestión de los pisos, apartamentos o complejos turísticos, suele haber consideraciones negativas, la mayoría en torno a un cuestionable concepto como es la gentrificación, especialmente en el caso de Córdoba, que tiene desde hace décadas un casco histórico muy deshabitado y con la población generalmente envejecida. A día de hoy se cifran en cerca de 300 los solares y viviendas deshabitadas en esta parte antigua. Muchas veces son las empresas de diversa índole -hosteleras, hoteleras o inmobiliarias- las que rehabilitan estas viviendas o solares en pésimo

estado.

En este contexto, el parecer de los presidentes del Centro Comercial Abierto de la Viñuela y Ciudad Jardín, Manuel Calvo y Ramón Luque, ante un fenómeno que se va colando en sus barrios de detallistas apunta en otra dirección. Ven la transformación de locales comerciales en pisos turísticos como un «cierto estímulo o al menos aceptable ayuda» para la actual coyuntura comercial de sus respectivas zonas, según admiten a ABC.

En ambos casos, el proceso se ha centrado más bien en vías secundarias a las más eminentemente comerciales, aquellas que por su situación fueron poco a poco perdiendo el tren del comercio tradicional. Por ejemplo, en la Viñuela hablamos de Conquistador Benito de Baños y Cronista Maraver. En este último caso el cambio ha sido más llamativo al afectar a un conocido comercio tradicional: Confecciones Velasco. Al tratarse de talleres de gran tamaño han dado lugar a multitud de locales destinados al uso turístico. Si hablamos de Ciudad Jardín, esta transformación empezó ya hace tiempo en la calle Previsión. Luego ha continuado por Maestro Priego López, Perpetuo Socorro, Pasaje Antonio Zurita y Camino de los Sastres. E incluso ha saltado ya a Vistalegre.

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El presidente del Centro Comercial Abierto de La Viñuela, Manuel Calvo, ha acogido toda esta rapidísima evolución del barrio con una acogida positiva, pero a su vez moderada. «La parte positiva es que se arreglan los locales y su fachada queda bonita, aunque nos pueda gustar más que fuesen comercios», dice. En ese sentido, ¿cree que pudiera extenderse a la parte más comercial? La respuesta es negativa por dos motivos esenciales. En primer lugar, porque «para los propietarios de comercios de esas arterias no resultaría rentable la inversión necesaria para convertir los locales en pisos turísticos, cuestión privativa de compañías que, por su naturaleza, son capaces de realizar y, sobre todo, rentabilizar grandísimas inversiones».

El caso más conocido, y además referido por Calvo, es el de Injupisa, que ha llenado Córdoba de viviendas y alojamientos a ras de suelo por la amplia cartera de locales comerciales de que disponía, muchos de ellos vinculados a la sociedad de supermercados familiar Piedra.

En segundo lugar porque la salud de la Viñuela en el ámbito comercial es ahora mismo notable. Tras unos años pasados algo pesimistas al respecto, el presidente del CCA reconoce que el problema de los locales vacíos, que coparon las páginas de los medios en años recientes, está resuelto, y «son muy pocos los que quedan huérfanos de su respectivo y potencial comerciante».

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En resumidas cuentas, para un particular no sale a cuenta ni adentrarse a título propio en el mundillo turístico ni vender un negocio en un entorno aún próspero. «Esto es un' boom', como en su época estuvo el de la construcción, el que hizo el primero este tipo de apartamentos estará ganando, pero ¿y los que se están añadiendo?: esto tiene su límite», reseña Calvo, para quien el atractivo de la Viñuela en este caso es relativo, pues aunque el barrio está cerca de la muralla del Marrubial o de María Auxiliadora, y de ahí a una paso del casco histórico, queda lejos de su núcleo más turístico.

En el caso de Ciudad Jardín sucede lo contrario, y dicho barrio queda a un paso de la Judería y San Basilio, por ejemplo. Por eso el crecimiento está siendo mayor y se prevé que continúe la tónica. El responsable del CCA de Adecoc, Ramón Luque, acoge con mayor agrado que su colega -siempre dentro de la contención- lo que está sucediendo al respecto.

«Veo esto positivo siempre que no se dé en calles comerciales, sino mientras que venga a solucionar el problema que había en las calles aledañas, ya que ahí sí ahí demasiados locales vacíos». Éstos ya iban teniendo un aspecto cada vez más descuidado que, a su vez, influía en la imagen global de la zona comercial. En ninguno de los dos casos, Viñuela o Ciudad Jardín, se han producido problemas añadidos a este tipo de abandonos, como puede ser suciedad o incluso okupaciones. Todo se centra en la estética. Luque concreta que están controlando esta tendencia por si irrumpiera. «Ya estamos hablando del tema, pero de momento no se ha tomado ninguna medida».