Antonio Díaz, presidente de la Agrupación de Cofradías de Lucena: «La Magna es un escaparte para mostrar la Semana Santa y el rito de la santería»

-La Magna será, sin duda, uno de los grandes hitos de las últimas décadas en Lucena. ¿Qué significa para la ciudad y para la Agrupación de Cofradías de Lucena organizar un acontecimiento de esta magnitud?

-La Magna es un acontecimiento histórico para Lucena. Supone situar a la ciudad en el epicentro del arte sacro, la tradición cultural y el turismo religioso. Para la Agrupación, es la culminación de años de trabajo en defensa de un patrimonio único: nuestra Semana Santa y, en especial, la santería, recientemente declarada Bien de Interés Cultural, que constituye seña de identidad y expresión social de todo un pueblo.

-Hablar de una procesión magna es hacerlo de una suma de voluntades, que en esta ocasión se han coordinado desde la comisión organizadora. ¿Cómo ha sido el proceso de coordinación entre hermandades, instituciones y entidades?

-Desde hace dos años funciona una comisión organizadora integrada por la Agrupación de Cofradías, el Ayuntamiento y representantes del ámbito cofrade y santero. La implicación de las 17 hermandades pasionistas, además de la patrona, María Santísima de Araceli, ha sido total, con más de 1.300 personas participando en el cortejo. La clave ha sido sumar voluntades y trabajar con rigor: cada hermandad aporta su patrimonio y su cuadrilla de santeros; las instituciones garantizan la logística y la seguridad; y nosotros hemos intentado encajar todas las piezas para hacer realidad un proyecto muy ambicioso.

-Este tipo de actos tienen siempre una enorme carga simbólica, pero también un reto logístico. A menos de veinte días para la celebración del gran día, ¿qué detalles quedan pendientes?

-En estas semanas finales se están rematando los aspectos técnicos que garantizarán el éxito del acontecimiento: la confirmación de autoridades, la coordinación de los dispositivos de seguridad y emergencias, el montaje de la carrera oficial, así como la logística vinculada a accesos, evacuación y servicios para el público. Todo está orientado a que el próximo 27 de septiembre Lucena viva con plenitud un día histórico. El Plan de Seguridad y Evacuación, elaborado por el arquitecto Manuel Roldán, contempla accesos controlados, voluntarios de Protección Civil, 24 vigilantes privados, más de 50 voluntarios y efectivos de Policía Local, Nacional y sanitarios. La carrera oficial, de 550 metros, cuenta con salidas de evacuación y un sector reservado para personas con movilidad reducida.

-El público espera imágenes históricas, momentos únicos. ¿Qué instantáneas cree usted que quedarán grabadas en la memoria colectiva de los lucentinos?

-Serán muchas las estampas que quedarán grabadas en la memoria colectiva: la presencia de María Santísima de Araceli presidiendo el cortejo desde San Mateo; el discurrir cronológico de los 18 pasos por la Plaza Nueva en la que se vivirá la primera carrera oficial de la historia de Lucena; el sonido inconfundible del tambor y el torralbo; y el encuentro irrepetible de imágenes con siglos de historia, desde el XVI, reunidas en un mismo cortejo como nunca antes se había visto en la ciudad. Mostrar la santería al mundo será, sin duda, nuestro mayor reto.

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-Una procesión magna no solo es una manifestación de fe, también es un motor cultural y económico. ¿Qué impacto prevé que tenga para la ciudad, tanto a nivel turístico como de proyección exterior? ¿Manejan datos de ocupación hotelera y previsión de asistencia?

-Lucena ya tiene ocupación hotelera completa para ese fin de semana y se espera una gran afluencia de visitantes de Andalucía, España y el extranjero. Será un motor económico que beneficiará a hostelería, comercio y servicios turísticos. Además, consolida a Lucena como destino de turismo cultural y religioso de primer orden.

-La Semana Santa de Lucena cuenta desde 2003 con la declaración de Fiesta de Interés Turístico de Andalucía y, recientemente, la santería ha sido reconocida como Bien de Interés Cultural. ¿De qué manera se convierte la Magna en un paso decisivo para reforzar ese prestigio y avanzar hacia el reconocimiento de Interés Turístico Nacional?

-La Magna es un escaparate inmejorable para mostrar al mundo la singularidad de nuestra Semana Santa: una tradición centenaria, el rito de la santería único en el mundo y protegido como BIC, un patrimonio artístico y devocional único, y un gran impacto cultural y turístico. Entendemos que será un impulso para reforzar el camino hacia la declaración de Fiesta de Interés Turístico Nacional.

-Organizar un acto así exige recursos humanos y económicos. ¿Con qué apoyos cuenta la Agrupación y cómo se están gestionando para garantizar la sostenibilidad del evento?

-Contamos con el patrocinio del Ayuntamiento de Lucena y la Diputación de Córdoba, además de la colaboración de un inmenso equipo para hacer posible este gran evento. La recaudación de las 1.853 sillas de la Plaza Nueva se destina íntegramente a Cáritas Parroquiales, lo que aporta un valor solidario al evento.

-Ese día será también único por celebrarse la primera Carrera Oficial de la Semana Santa de Lucena, además de por la ubicación de sillas en la Plaza Nueva, epicentro de la misma, ¿cómo cree que resultará y cómo se está desarrollando el proceso de reserva de entradas?

-Es una novedad absoluta en Lucena. La carrera oficial se estrena con un trazado de 550 metros que permitirá el mejor lucimiento de los pasos. La Plaza Nueva será el epicentro con 1.853 localidades, cuyo proceso de venta marcha a buen ritmo, superando ya el 60% de reservas.

-En relación a la agenda previa, están previstos traslados y una misa Jubilar. ¿Se podrán visitar los templos previamente?

-El domingo 21 se celebran los traslados de la Soledad, desde Santiago, y de la Virgen de Araceli desde su Real Santuario, y el martes 23 el de Jesús del Valle. Estamos pendientes de confirmar la fecha del traslado de la Humildad del Carmen. El resto de imágenes procesionan el día de la Magna desde sus sedes canónicas. El viernes 26, víspera de la Magna, tendrá lugar la Solemne Misa Jubilar en San Mateo, presidida por el Obispo de la Diócesis de Córdoba. Además, los templos permanecerán abiertos para la visita de los pasos entronizados el sábado por la mañana y, en algunos casos, el viernes por la tarde.

-Están realizando un importante trabajo de difusión, ¿se están volcando para que la Magna llegue a todo el mundo?

-Se ha estrenado una nueva web oficial, se edita una revista Torralbo especial Magna, se han diseñado desplegables y carteles, y contamos con un spot promocional patrocinado por Diputación. Habrá cobertura de medios locales, regionales y nacionales, con directos de radios y televisiones, y presencia de prensa nacional. Todo este esfuerzo está orientado a que el visitante comprenda la idiosincrasia de Lucena antes de llegar que para nosotros es fundamental: la santería es importante conocerla para poder vivirla en plenitud.

-¿Qué mensaje le gustaría trasladar a los lucentinos y visitantes que esperan con expectación la llegada de la Magna?

-La Magna de Lucena es una llamada al mundo para compartir fe y tradición, siempre desde el respeto y, por supuesto, con la máxima alegría. No será solo un desfile, es una catequesis en la calle, una experiencia de fe que muestra la religiosidad popular de un pueblo que vive sus tradiciones durante todo el año. Invitamos a todos a sentir la fuerza de la santería, el patrimonio de nuestras cofradías y la hospitalidad de un pueblo que abre sus puertas y su alma para compartir lo que somos.