El agua, una magnífica guía para sumergirse en la Subbética de Córdoba

Los destinos costeros no son para muchos una opción ahora que ya empiezan a masificarse, y es posible disfrutar de entornos más frescos, en los que el agua es la protagonista, sin salir de la provincia.

La Subbética presume de arroyos, fuentes, manantiales, cascadas... ABC realiza un recorrido por algunas de estas localizaciones.

Integrada en un frondoso parque emana la Fuente del Río de Cabra, donde tiene su origen la masa de agua del mismo nombre. El lugar, que fue declarado Sitio de Interés Natural en 1929, destaca por la perfecta conjunción de elementos: zonas recreativas, anfiteatro, piscinas, restaurantes y jardines.

El recinto ajardinado, presidido por la Virgen de la Sierra, se inscribe en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Paraje Pintoresco.

AL tratarse de un espacio urbano, su acceso es muy sencillo; desde la autovía a Málaga, se llega a la zona a través de la A-318 primero y la A-339 después. La captación del agua de este manantial es la principal fuente de abastecimiento del término municipal de Cabra.

Salpicado por múltiples fuentes, Priego de Córdoba es otro de los municipios en los que el agua está presente en todo su núcleo urbano.

Su principal manantial es la Fuente del Rey, declarado Patrimonio Nacional. Cuenta con 139 chorros y tres estanques a distinto nivel. Muy próxima está la Fuente de la Salud, del siglo XVI, también llamada fuente de la Virgen de la Cabeza. Estas fuentes son manantiales kársticos: el agua mana del subsuelo.

Muy cerca, en la aldea de Zagrilla Alta existe otro mantantial integrado en la localidad y en excelente estado de conservación. El agua brota entre rocas y plantas que sirven de ornamento. Junto al manantial se encuentra un lavadero con 13 pilas bajo un edificio techado .

En la pedanía Nacimiento de Zambra (término municipal de Rute) se encuentra el nacimiento del río Anzur, un afluente del Genil que, junto con el Lucena, conforma el paraje natural del embalse de Cordobilla. Discurre acompañado de chopos, sauces y olmos, que aportan unas tonalidades verdes muy destacadas entre la monotonía del olivar circundante.

Antiguamente, sus aguas movían las ruedas de los numerosos molinos de harina que había a lo largo de su recorrido. Además, también hubo dos fábricas de luz, que suministraban fluido eléctrico a Zambra, El Telar en El Portugalejo y La Pintada en Los Cortijuelos.

Junto a los múltiples atractivos del municipio de Zuheros, que ha sido catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España, destaca realizar la ruta del río Bailón (hay que contar con la autorización de la Delegación Provincial de Medio Ambiente -telefono de contacto:671 562 045-).

El recorrido transcurre por una de las zonas de encinares mejor conservadas de Andalucía, comienza en el Poljé de La Nava de Cabra (un extenso valle, completamente plano, situado a 1.000 metros de altura) y va descendiendo siguiendo en parte el recorrido del río, hasta llegar a Zuheros.

En verano y cuando el caudal lo permite se puede tomar un refrescante remojón en la pequeña cascada del río Bailón. Es aconsejable llevar cangrejeras para los pies y ropa de baño.

No todo van a ser paseos bucólicos por entornos que el agua riega y refresca. Los amantes de la aventura tienen otra forma más que interesante de disfrutar el preciado líquido: con deportes de aventura. Para ello, el río Genil, a su paso por la localidad de Benamejí, es idóneo para la práctica del rafting.

Existen diversas empresas que ofertan recorrer parte de su cauce (desde Benamejí hasta Palenciana) sobre una balsa. La duración es de unas cuatro horas (dos horas de descenso).

El periodo para practicar rafting en este enclave es desde mayo a septiembre, aunque el verano es la temporada alta y, a veces, el período se amplía porque se suelta más agua desde el embalse del Iznájar.

Otra escapada refrescante es la que tiene como destino la localidad de Iznájar y su playa de Valdearenas. Este paraje tiene una superficie de algo más de 160.000 metros cuadrados, con una longitud de playa de 1,5 kilómetros. A la postre, es la única de interior en Córdoba (y en toda Andalucía) que admite mascotas.

El embalse ofrece también un ecosistema de gran riqueza en su fauna avícola y piscícola, lo que hace que la zona no sólo sea apta para la práctica de la pesca o la observación de aves sino también para la práctica de deportes náuticos o el senderismo.

En la misma zona de Valdearenas se encuentran ubicadas también las instalaciones deportivas de la localidad.