Los abortos repuntan en Córdoba un 10% en dos años y rozan las cifras anteriores a la pandemia

El análisis de las cifras que proporciona el Ministerio de Sanidad muestra que en cinco años la curva que fue descendente se ha ido recuperando, de forma que en 2023 todavía se dieron en la provincia menos interrupciones voluntarias del embarazo que en 2019, aunque la tendencia al alza podría hacer pensar en que pronto podría superarse.

Noticia Relacionada

Vidas salvadas del aborto en Córdoba: «Ahora sé lo que es el amor verdadero»

Luis Miranda

Mujeres con embarazos en situación de dificultad cuentan cómo decidieron apostar por sacar a sus hijos adelante

Así, en 2019 en Córdoba se registró una cifra de 1.295 abortos, de los 99.149 que se practicaron en toda España. En Andalucía fueron 19.082 los niños concebidos que no llegaron a nacer. Córdoba había sido entonces, eso sí, la segunda provincia andaluza con menos interrupciones del embarazo, sólo por encima de las 789 de Jaén y por debajo de otras como Huelva (1.527) y sobre todo Almería (2.081) que tienen menos población total.

En 2020 la cifra cayó hasta los 1.117, y también lo hizo en España (88.269) y en el conjunto de Andalucía (17.121). Fue un año con menos contacto social debido primero al confinamiento y más tarde las restricciones a la libertad de movimientos, y eso repercutió en esta cifra, que cayó un trece por ciento en la provincia de Córdoba.

Repuntó algo en 2021, también marcado por las restricciones, y la cifra de interrupciones del embarazo quedó en 1.152, lo que supone 31 más en términos absolutos. El mayor crecimiento porcentual de los últimos años se dio entre 2021 y 2022. En ese año se llegó a 1.224, lo que supone una subida del 6,25 por ciento. Continuó en el año pasado, cuando las interrupciones voluntarias del embarazo fueron 1.268, lo que supone un descenso del dos por ciento en un lustro completo, y que contrasta con lo que sucede en el entorno. La subida en dos años es del 10%.

Así, en el conjunto de España, en este mismo período, se pasó de 99.142 a 103.097 (casi un 4 por ciento más) y en Andalucía llegaron desde los 19.082 a los 19.474 (lo que supone un crecimiento del dos por ciento). En relación con el resto de las provincias de Andalucía sucede lo mismo que en 2019: Córdoba es el segundo territorio de Andalucía en que menos abortos se practican, sólo por encima de Jaén (798) y por debajo de los 1.548 de Huelva (con 200.000 habitantes menos) o los 2.045 de Almería (que ha crecido en los últimos años hasta acercarse a una distancia de 20.000 habitantes con respecto a a Córdoba). Muy lejos están los 4.960 de Sevilla y los 4.381 de Málaga, que son los territorios más poblados.

El análisis por edades muestra que en 2023 terminaron su embarazo de forma voluntaria tres mujeres de menos de 15 años y 187 de hasta 19. El grueso estuvo en la franja que va desde los 20 hasta los 34, en que fueron 798 mujeres repartidas entre los 20 y 24 (273), los 25 a 29 (277) y los 30 a 34 (248). Bajan conforme avanza la edad y también la fecundidad: 192 tenían entre 35 y 39 años, 80 de los 40 a 44 y ocho superaban esta edad, que es un momento a partir del cual se considera que el embarazo presenta más riesgos para la madre o el hijo.

Los datos del Ministerio de Sanidad muestran también el nivel de estudios, que muestra que una gran parte de las mujeres tenían al menos estudios secundarios: 356 la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), 404 Bachillerato o Ciclos Formativos y 176 estudios universitarios.

Siete eran analfabetas y 429 habían completado los primeros estudios. Haber recurrido a la interrupción voluntaria del embarazo no fue un problema para tener más hijos, como recogen los datos del Ministerio de Sanidad. De las 1.268 que abortaron en 2023, sólo 569 (el 44 por ciento) no tenían hijos que viven, mientras que 280 tenían uno, 282 dos, 100 ya tenían tres, 24 tenían 4 y 13 cinco o más hijos.

Para un total de 822 era la primera vez que interrumpían el embarazo, lo que supone el 64 por ciento, pero 289 ya lo habían hecho con anterioridad una vez, 97 en dos ocasiones, 33 en tres, 8 en cuatro y 19 habían abortado previamente cinco veces o más.

¿Cómo se llegó a la situación de renunciar al hijo no nacido? La estadística del Ministerio de Sanidad también recoge si se utilizaron o no métodos anticonceptivos para evitar un embarazo no deseado. La respuesta es, en la mayor parte de los casos, que no. 704 mujeres de las que interrumpieron el embarazo (el 55 por ciento) no utilizó ninguno.

El resto fueron fallos, ya que 341 dijeron haber utilizado métodos de barrera (como el preservativo o el diafragma) . Un total de 165 habían optado por métodos hormonales (como la píldora), 21 por métodos naturales, como los que se refieren a la observación de los ciclos de la ovulación.

En diez casos fueron métodos mecánicos. Entre los motivos que alegaron para solicitar la interrupción voluntaria del embarazo, la casi totalidad se enmarcan en la petición de la mujer, según lo recogido en la ley. Fueron 1.183, el 93 por ciento del total.

En 36 habría grave riesgo para la vida o salud de la mujer embarazada, mientras que 46 lo hicieron por riesgo o graves anomalías en el feto. Tres de los casos se presentaban con anomalías fetales incompatibles con la vida o enfermedad grave e incurable, según los datos reunidos por el Ministerio de Sanidad sobre los supuestos que estaban contemplados en la ley anterior.

La mayor parte de los abortos fueron bastante tempranos, y en concreto 873, más de la mitad, se produjeron antes de las ocho semanas de gestación. Otra cifra significativa fueron los 318 que llegaron entre las 9 y las 14 semanas.

Bastante más reducida, aunque hubo casos, fueron las cifras a partir de ahí: un total de 74 mujeres terminaron con su embarazo entre las 15 y las 22 semanas y hasta 3 a partir de la semana número 23. Es decir, casi a los seis meses.

Para llegar hasta allí la casi totalidad solicitaron o recibieron información en centros sanitarios públicos. En total fueron 1.210, mientras que 41 lo hicieron en clínicas o centros privados y 17 encontraron información a través de internet.