La Junta recibe la reprobación por no ser de ayuda a Córdoba

Durante el pasado mandato, el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, ha mantenido numerosas polémicas con la Junta a cuenta de diversas iniciativas. A estas alturas, el Gobierno autonómico solamente puede presentar el inicio de las obras de la Ciudad de la Justicia y la terminación de la travesía de Villarrubia como logros ciertos. En el resto, ha habido una tónica general de negativas frente a las propuestas o demandas del PP municipal.

No se trata de un asunto que pase inadvertido para la opinión pública. El votante del PP es particularmente crítico -un 52,3 por ciento cree que es una traba para el desarrollo de la capital- aunque eso pueda entrar dentro de la normalidad política. El problema para el PSOE es que ni siquiera sus propios votantes consideran que la Junta ha realizado un trabajo positivo para la ciudad. Un 7,9 por ciento de quienes dicen que le van a votar consideran que lo ha hecho. De hecho, porcentualmente hay más votantes del PP que del PSOE que entienden que la Junta no lo ha hecho tan mal. El dato es relevante a la luz de la candidata socialista, Isabel Ambrosio, que ha sido delegada del Gobierno durante ocho años y que ha adoptado una línea de exigir proyectos que el Ejecutivo socialista ha dado de lado sistemáticamente.