Infraestructuras
El Metrotrén podría arrancar en verano con una frecuencia de paso de una hora
ADIF considera materialmente imposible que las obras de mejora en las tres estaciones estén finalizadas en mayo
J. M. C.
Aunque en el seno de ADIF y Renfe prefieren calificarlo de Cercanías, el futuro Metrotrén de Córdoba, que todavía tiene que perfilarse en materia de servicios a dos bandas entre el Ayuntamiento y Fomento -habida cuenta que la Junta no termina de definir su participación-, ... ya empieza a mostrar algunos detalles, como los posibles horarios y las tarifas a pagar por los ususarios.
Por lo pronto, es ya segura la imposibilidad de que para las próximas municipales de mayo el Metrotrén esté en funcionamiento, porque las cuentas no dan lugar a dudas. Según fuentes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias de España, «el pasado 16 de marzo se dio el pistoletazo de salida cuando Dragados firmó con ADIF el acta de comprobación del replanteo y el contrato para el inicio de las obras, que efectivamente ya están en marcha en Villarrubia». «Son cuatro meses mínimo de ejecución, con lo que suena más bien el mes de julio», dijeron las fuentes consultadas.
Pero al margen de que para esa fecha esté o no la infraestructura ya rematada, lo cierto es que en la empresa pública de transportes ferroviarios comienzan a sonar con fuerza algunas cuestiones que, por el momento, parecen satisfacer las demandas planteadas inicialmente por el Ayuntamiento cordobés.
20 minutos en hora punta
«En principio, se plantea una frecuencia de arranque de una hora entre convoy y convoy», según expuso el responsable en Renfe de CC.OO., Juan Manuel León. Algo que casa a la perfección con la idea de comenzar el proyecto con las tres estaciones que se están habilitando, Villarrubia, Alcolea y El Higuerón, para luego ir reduciéndola a medida que se vayan añadiendo usuarios hasta llegar a una frecuencia de 20 minutos en hora punta, contando con 32 servicios diarios de ida y vuelta.
Ese dato se calcula para cuando estén en servicio todos los apeaderos. Para los cinco que entrarán en funcionamiento el próximo verano, la cifra de convoyes bien podría estipularse en 28 o algo menos.
«El uso y la demanda es lo que va a determinar la frecuencia final de trenes, y estas cosas van de menos a más, porque hay que recordar que la lanzadera entre Córdoba y Rabanales cuando comenzó a funcionar en 1996 tuvo una incidencia mínima y a día de hoy mueve entre 800.000 y 900.000 viajeros anuales», abundaron desde la empresa pública ferroviaria.
Más difícil es afinar en materia de horarios. La lógica señala que el servicio irá desde las 06.15 horas (una hora antes de comience a funcionar el tren entre Córdoba y Rabanales) y estaría en servicio hasta las 22.00 horas, a fin de que «se pudiera vincular a los trenes de larga y media distancia y a las finalizaciones de jornada», apuntó el responsable de CC.OO.
El precio sería muy similar al de otros Cercanías
En cuanto a precios, tampoco hay nada decidido, pero lo que se plantea es que se sigan otros modelos similares de Andalucía, tales como los Cercanías de Málaga, Cádiz y Sevilla, así como el actual servicio a la UCO. En todos ellos se marca un precio del billete sencillo de 1,80 euros (1,85 en Rabanales) para las llamadas zonas 1 en cada caso, que tienen un carácter parecido a la idea que se pretende poner en marcha en Córdoba. Los abonos mensuales salen entre los 34,70 de Sevilla y los 39,10 euros de Cádiz.
Y si algo comienza a cobrar fuerza para materializarse es el uso de los trenes Civia serie 465 para sustituir a los actuales Civia de la serie 446, más modernos, rápidos y dotados de una mayor capacidad.
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