Nieto anuncia que optará a la reelección como alcalde de Córdoba

«QUIZÁS ha llegado el momento de mirar atrás para analizar qué ha sucedido en Córdoba en los últimos años. Han transcurrido casi cuatro desde que tuve el honor de ser elegido alcalde de Córdoba, un período apasionante, complejo y lleno de retos que tuvimos que afrontar desde un nuevo gobierno municipal que siempre tuvo claro que debía poner en pie el proyecto para el que logró la confianza de una amplia mayoría de la sociedad cordobesa.

Y ese objetivo no era otro que impulsar el cambio que hiciera de Córdoba una ciudad de progreso, moderna, que compitiera en igualdad de condiciones con las ciudades de su entorno. Una ciudad integradora y a la vez segura.

Hoy podemos decir que ese proyecto se ha puesto en marcha, no sin dificultades, gracias al esfuerzo de toda la sociedad cordobesa que ha afrontado los retos a los que nos enfrentábamos, sacando lo mejor de sí para vencer la crisis.

Los inicios fueron complejos. La situación económica del Ayuntamiento de Córdoba era peor de lo que apuntaban los datos oficiales. No aparecían deudas no contabilizadas, situaciones derivadas de pagos de sentencias, facturas no reconocidas hasta ese momento que situaban al Ayuntamiento al borde del colapso financiero, poniendo en riesgo hasta el pago de las nóminas a los trabajadores.

Difícil escenario que obligó a iniciar reformas para ordenar las cuentas municipales, evitando el despilfarro y el desorden, generando fórmulas de eficiencia que garantizaran los servicios básicos. Se redujeron los cargos de confianza y los gastos en suministros hasta lograr un ahorro de 26 millones de euros en cuatro años.

Ordenar el Ayuntamiento para impulsar el cambio en la ciudad, con medidas dirigidas a atender, con participación real de los vecinos, obras en todos los barrios de la ciudad -150 actuaciones en estos cuatro años-, fortalecer y apoyar a sectores que como el turismo, la agroalimentación, la joyería y la construcción son ejes de desarrollo de riqueza y de generación de empleo… Ésas fueron nuestras prioridades.

Confiar en un cambio político en Córdoba era apostar por las grandes inversiones en la ciudad. Con certezas y sin frustraciones. Descartados el Palacio del Sur y el tranvía que anunció la Junta. En pocas semanas se adjudicará la obra del Centro de Exposiciones Ferias y Convenciones y, en breve, será realidad el MetroTren, que conectará las barriadas de Córdoba en apenas 12 minutos con el centro de la ciudad. La Bibliotecade los Jardines de Agricultura, olvidada durante demasiados años, ha arrancado.

Hace cuatro años prometimos el cambio que hoy es una realidad. Hoy, se mire donde se mire, Córdoba ha mejorado de manera sustancial y lo va a seguir haciendo en el futuro si no volvemos a las causas que nos llevaron a la crisis ni a las manos de quienes lo provocaron.

Me comprometí con el empleo, porque una ciudad que funciona, que se organiza, que se une, genera empleo. Llegamos a una ciudad que destruía casi nueve empleos al día y hoy, desde que pudimos aplicar nuestro programa, se crean más de ocho empleos diarios. El último dato de la EPA, ya acredita que hay menos parados que cuando llegamos al gobierno.

El trabajo de estos cuatro años, sus resultados, son fruto del esfuerzo colectivo. He planteado a mis compañeros de gobierno y a los afiliados la reflexión sobre quién debe consolidar el proyecto del cambio en los próximos años. Nunca podré agradecerles suficientemente su lealtad y compromiso. Y su trabajo. A todos, los que creen que debo continuar y a los que no, mi agradecimiento permanente.

Por ello y por otras cosas más, quiero hacer pública hoy mi disposición a seguir trabajando por Córdoba, por seguir mejorando nuestra ciudad. No ha sido fácil superar este primer reto, pero pese a las dificultades, jamás podré expresar el honor que para mí ha sido ser alcalde de Córdoba. El próximo 24 de mayo los cordobeses volverán a tener la palabra y serán ustedes quienes decidan si mantener o no el cambio que ha hecho posible que, mire donde se mire, Córdoba mejore.