Una hoguera con dos siglos de historia

«Esperamos que el tiempo nos acompañes para poder celebrar el éxito que ha tenido la Candelaria en los años anteriores», explicó el alcalde de Dos Torres, Manuel Torres.

Visitar este pueblo este fin de semana es saltar dos siglos atrás en el tiempo y volver a la época en la que la Plaza de la Villa era el corazón de la localidad. El Ayuntamiento ha convertido el centro del municipio en un paseo por la historia de aquellas antiguas villas. La Plaza de la Villa y la Plaza de Torrefranca, como sus entornos, se encuentran ambientados de época y en ellas se desarrollan las actividades programadas para la celebración.

El mercado franco, las visitas teatralizadas por el Conjunto Histórico, la ruta gastronómica, la interpretación, el baile de jotas, la música popular, las exhibiciones de cetrería, las demostraciones artesanales, los juegos populares y las degustaciones de productos típicos en la ruta gastronómica por los establecimientos del municipio serán algunas de las actividades más destacadas en este fin de semana de historia y tradición. «La gran novedad de este año es el aumento de actividades para los más pequeños. Destaca el torneo medieval donde los niños cabalgarán sobre caballos de goma espuma para batirse», señaló el alcalde.

El día grande será hoy, cuando se viva el momento culmen de la fiesta con la inmensa hoguera de troncos de encinas centenarias. «Este año los operarios han dicho que la gran masa de leña tiene más de una treintena de troncos», matizó Torres. El calor de la hoguera prenderá los bailes medievales alrededor del fuego. Esta es una de las fiestas grandes del municipio y los vecinos se vuelcan con la celebración.

La Escuela Municipal de Adultos será la encargada de mostrar a los visitantes y vecinos los acontecimientos de la unificación. Serán ellos los encargados de representar en la Plaza de la Villa, junto a la inmensa hoguera aún sin encender, «El Almirez y la Machacaera», una adaptación teatral que hace alusión al 175 aniversario de la unificación.

Todo recordará aquellos momentos y habrá horarios especiales de visita en los monumentos y museos de la localidad. La Iglesia de la Asunción será uno de los monumentos para no perderse, así como el centro de Interpretación de la Arquitectura Popular, que ofrece un repaso a la arquitectura señorial que imperaba en la comarca.

Una fiesta en la que todos tienen su cabida. Las asociaciones se encargan de los puestos del mercado franco, donde venden dulces típicos y manualidades, para recaudar fondos para las actividades que llevan a cabo durante el año. Por otro lado, la ruta gastronómica ofrecerá a los visitantes del municipio este fin de semana los productos típicos de la localidad y platos elaborados a partir de aquellos alimentos que ofrece la tierra.