Una reacción a medio camino

El encuentro enfrentaba a dos conjuntos de la zona baja de la tabla, separados únicamente por un punto a favor de los marbellíes, por lo que ambos tenían gran necesidad de puntos. El conjunto local llevaba 474 minutos sin encajar un gol y, cosas del fútbol, en un par de minutos consiguió dos, aprovechando sus primeros remates sobre la portería de Javi López.

Tras los primeros instantes de tanteo, el lateral derecho Marcos Ruiz enganchó una espectacular volea desde la esquina del área y clavó el balón en la escuadra para abrir el marcador. Se habían consumido 11 minutos y el Marbella rompía su sequía anotadora. Y sólo dos minutos después, Sergio Narváez cazaba un balón en el área y de disparo raso ponía el 2-0 en el marcador. Máxima efectividad por parte de los locales, que encarrilaban el partido ante un rival noqueado en estos momentos.

Pero no estaba ni mucho menos muerto el Lucena, que fue poco a poco reaccionando. En el minuto 20 llegó el primer disparo a puerta, de Sarmiento desde fuera del área, desviado.

Y el choque cambió en el minuto 24, cuando Pepe Díaz robó un balón a la defensa local, se coló por la zona izquierda del ataque y sirvió para que Jony Lomas marcase a puerta vacía. El conjunto celeste se metía de lleno en el partido y más pudo hacerlo sólo dos minutos después. En otro error de la defensa local, Pato robó el balón y se plantó ante el portero Reina que le sacó el mano a mano.

El conjunto que entrena Serafín Gil se fue creciendo en el campo y fue mejor en el último cuarto de hora, el que dio mucha sensación de peligro y también dispuso de algunas ocasiones ante un rival nervioso y que, lejos de marcar dos goles, no hizo mucho. El único equipo sobre el campo era el Lucena y se intuía el empate a dos que finalmente no llegó, aunque lo volvió a rozar Pato con una vaselina en el último minuto del primer periodo.

Para el segundo acto, Pablo Alfaro introdujo un cambio en el centro de la defensa al dejar en el vestuario a Paco Aguza, desafortunado en este primer tiempo, para dar entrada al lituano Edy con la intención de ganar consistencia en la retaguardia.

Tras unos instantes iniciales de presión local, enseguida el Lucena volvió a tomar el mando y tuvo la primera ocasión a balón parado con un remate de Santacruz a las manos de Reina tras una falta lateral (min. 58).

Enseguida llegó el merecido empate, gracias a un penalti por unas manos un tanto inocentes de Edy en el área, que transformó Pepe Díaz. Era el minuto 60 y quedaba mucho tiempo por delante, aunque el Lucena había hecho ya lo más difícil como era igualar dos tantos de los locales.

El Marbella intentó reaccionar y, sobre todo, lo hizo Pablo Alfaro desde el banquillo. Retiró a su delantero, Borja Rubiato, y dio entrada a Carlos Expósito en el interior derecho. El cambio fue providencial para el equipo ya que por esa banda llegó el peligro.

En el minuto 66, un centro de Expósito lo remató a bocajarro Sergio Narváez en el primer palo a las manos de Javi López. Fue el aviso de una acción similar, en el minuto 71, que en esta ocasión sí envió a las mallas Diego Segura para hacer el 3-2.

El mazazo fue importante para el Lucena, que aún así lo intentó en el tramo final, aunque los locales también buscaron el contragolpe. Torres la tuvo en el minuto 81 al enviar muy cerca del poste un libre directo desde la frontal del área.