Las contradicciones de María Jesús Montero sobre Santos Cerdán: de ser «uno de los mejores» a alguien que «no tiene que ver con el PSOE»

La vicepresidenta del Gobierno de España y líder del PSOE andaluz ha sorprendido con sus declaraciones, precisamente en Sevilla, tras la colocación de la primera piedra del Centro Común de Investigación (JRC). Los periodistas le interpelaron sobre la posibilidad de convocar elecciones anticipadas después de que el magistrado enviara a la cárcel al anterior secretario de organización del partido.

Montero mostraba su «respeto absoluto» a la decisión del Tribunal Supremo (TS), si bien esto parece que no supondrá nada más ni en el Gobierno ni en el PSOE. Pedro Sánchez no se plantea convocar los comicios, «para nada», refuerza Montero, pues desvincula totalmente el caso Santos Cerdán de la formación. «Es una persona que no tiene que ver con el Partido Socialista», y «lo que queremos es que colabore y que la justicia llegue hasta el final para ser capaz de averiguar todo lo que ha ocurrido en torno a este caso».

Muy lejos en el argumentario, que no en el tiempo, quedan esas declaraciones en las que la ministra de Hacienda reconocía una «relación de complicidad y amistad» con el ahora nuevo inquilino de Soto del Real. Esa persona que nada tiene que ver con el PSOE, pero por el que puso la mano en el fuego.

Pese a las publicaciones en prensa, no fue hasta que se conoció el informe de la UCO (Unidad Central Operativa de la Guardia Civil) cuando Pedro Sánchez obligó a dimitir a Santos Cerdán y provocó ese cambio de plano de 180 grados con respecto a su número 3. De poner las manos en el fuego por su inocencia (Montero y Bolaños), de mostrarle su «solidaridad» ante «el acoso de ultraderechistas disfrazados de periodistas» ('tuit' del 16 de mayo), a señalar que no tiene nada que ver con el PSOE.

María Jesús Montero se desliga ahora de Santos Cerdán, al igual que de Vicente Fernández. Precisamente, en una entrevista en el Correo de Andalucía aseguró que no sabe nada de él desde que se marchó de esta sociedad pública, hace casi seis años. Ahora, la UCO ha señalado que trabajó en Servinabar, una de las empresas clave de la trama, cuyo 45% de las acciones pertenecía al mismo Santos Cerdán. «No sabía que trabajaba en esa empresa y, por lo visto, es desde el año 2024, por lo que he leído en la prensa».