Un camionero de Almería atrapado en Inglaterra: «Nadie viene a informarnos y no tenemos ni aseos ni agua»

Este conductor del Grupo Belzunces de Huércal-Overa (Almería) lleva uno de los 40 camiones sitiados en suelo británico de esta empresa logística dedicada al transporte de productos hortofrutícolas. Lo habitual es llevar comida para un viaje de ocho o diez días, que es lo que suelen durar los trayectos, pero no para más tiempo. Necesitan una PCR para poder regresar, les han dicho que próximamente se la harían, pero no sabe ni cuándo ni dónde.

A las pésimas condiciones en las que se encuentran hay que sumarle el desconsuelo de no poder volver a casa por Navidad. «Hay filas y filas de camiones, tirados, sin ayuda. No sabemos cuando podremos regresar. Mi previsión era estar en casa en Nochebuena para ir a comer con mi familia, pero ahora tengo claro que no va a poder ser así porque en cada ferry entran medio centenar de camiones y aquí a miles», lamenta.

Sebastián continuará parado con su vehículo en un área junto a la carretera. Desconoce cómo va a poder regresar porque solo han habilitado un punto, los parkings están saturados y las autovías con largas colas donde apenas hay movimiento. « Es una locura porque nos dejan entrar, pero no salir de Inglaterra, nunca me había visto en una situación así , alguna vez en Alemania con las nevadas, pero allí lo solucionan rápidamente, te atienden y nos dan la ayuda que necesitemos. Pero los ingleses, es que son muy suyos», explica.

Este camionero almeriense de 49 años pasará la Nochebuena «blindado» en su camión . Tiene miedo a la nueva cepa de coronavirus y más después de ver cómo en las plataformas donde ha descargado «nadie llevaba mascarilla». «Es sorprendente, nos encierran, pero ellos no se protegen. Para que voy a decir otra cosa, tengo miedo, no me voy a juntar con otros compañeros porque no sé con quién han estado y si han pillado algo» afirma Pérez que reconoce no saber cuándo podrá retornar.

En su trayecto de vuelta tenía previsto bajar en ferry hasta Francia para luego cargar patatas, congelados o paquetería que tendrían que estar llegando ya a Mercamadrid o al centro logístico de León, antes de bajar a Almería. Sebastián pasará estos días como el resto de sus compañeros, sin familia y sin información, en la cabina de su camión a la espera de poder venir a España lo antes posible.