Junta y Defensor del Menor investigan malos tratos en el centro Tierras de Oria

La presidenta del Gobierno andaluz, Susana Díaz, ha abogado este martes por dejar actuar a la Justicia. Al respecto, ha comentado que la Junta «está depurando responsabilidades e investigando los hecho». En este sentido, ha precisado que, «parece ser, data de hace cuatro años» y que existen «denuncias cruzadas entre aquellos menores, que ya no son menores, y docentes» por lo que «hay que dejar actuar a la justicia». 

Por su parte, el portavoz del Ejecutivo, Miguel Ángel Vázquez, ha explicado que en dicho centro hubo menores que habían agredido a unos monitores «y fruto de esa agresión se aplicó la disciplina recogida en la Ley del Menor». Además, ha hecho hincapié en que «a día de hoy, esos menores ya son mayores de edad y ya han rendido cuentas con la Administración de Justicia».

Desde el Defensor del Menor en Andalucía se ha anunciado la apertura de una queja de oficio dirigida a la Consejería de Justicia e Interior para «supervisar» las actuaciones desarrolladas por el centro Tierras de Oria, «conforme al encargo y vinculación contractual con la Junta de Andalucía». Según este departamento, el inicio de esta acción es fruto de la noticia publicada en un medio de comunicación digital que está acompañada por «un vídeo de una duración de tres minutos y 36 segundos, en el que se muestra a dos jóvenes a los que, al parecer, se les está aplicando una medida de contención mecánica». 

Desde la plataforma «centrosdemenores.es» su gerente, Alfonso Galiana, ha criticado que la Junta de Andalucía «mire para otro lado» y participe en una «campaña de desacreditación» al estimar que los responsables del centro actuaron aplicando la disciplina recogida en el reglamento de la Ley del Menor.

Además, ha advertido de que el vídeo en cuestión «no es de hace cuatro años» y ha precisado que en cualquier caso «la antigüedad del vídeo no exime de responsabilidad» a los representantes del centro. También ha negado que existieran «agresiones a monitores del centro» que justificaran la aplicación de esta medida, pero que de haberlas habido «su encierro en una sala es suficiente», por lo que cree «injustificada» su «contención mecánica», máxime «cuando un niño está pidiendo ayuda y que le den agua».