Ningún alto cargo de la Junta de Andalucía quiere declarar ante la juez Alaya

Ninguno de los exaltos cargos del Gobierno andaluz que estaban citados para este lunes ha declarado ante la juez instructora de los ERE. Como últimamente es habitual, todos ellos se han acogido a su derecho para no contestar a los interrogatorios con lo cual han permanecido por espacio de apenas unos minutos en el despacho de la magistrada. La Fiscalía Anticorrupción tampoco ha solicitado fianzas de responsabilidad civil para ninguno de ellos.

Así ha ocurrido en la mañana de este lunes con los exviceconsejeros de Empleo, Justo Mañas y Agustín Barberá , con el exdirector de Trabajo, Francisco Javier Guerrero , que ha acudido con su habitual sonrisa, o con el exviceconsejero de Innovación, Jesús Rodríguez Román .

Por su parte, el exconsejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Martín Soler tampoco ha declarado, aunque ha presentado un escrito en el que se desvincula de la ayuda de 450.000 euros a Abantia Ticsa que le imputa la instructora.

Fuentes del caso han informado a los periodistas de que el exconsejero, aunque se ha negado a declarar, ha presentado un escrito en el que defiende su «completa falta de participación» en dicho expediente y asegura no haber tenido vinculación ni relación con el mismo, pues además explica que el expediente se inició después de que él fuera cesado como consejero.

Otro de los habituales, el exconsejero de Empleo, Antonio Fernández , al que la juez había citado para ampliarle la imputación, no ha podido acudir a su cita por haber fallecido su madre.

Alaya continúa con las declaraciones esta mañana y tiene más citaciones previstas para toda la semana . De momento no hay novedades del Tribunal Supremo que está a la espera de que la Fiscalía se pronuncie sobre la exposición razonada de motivos.