¿Por qué ha elegido Rajoy a Moreno Bonilla?

1. La presión del entorno más próximo. Juan Manuel Moreno Bonilla era la apuesta de varias personas muy cercanas a Rajoy: Soraya Sáenz de Santamaría, Javier Arenas y, sobre todo, Jorge Moragas, cuya ascendencia sobre el presidente es permanente y creciente. Frente a esta presión de «onda corta» ejercida desde el mismo Palacio de la Moncloa, los valedores de José Luis Sanz eran Juan Ignacio Zoido y María Dolores de Cospedal, que presionaban desde la estructura del partido. La resolución de la crisis andaluza evidencia que Rajoy es más permeable a la influencia de sus ayudantes en la Moncloa que de los de Génova.

2. La querella contra Sanz. Probablemente nunca se sabrá hasta qué punto influyó en la decisión de Rajoy el hecho de que tres concejales de Tomares estén imputados por una presunta contratación irregular , aunque sin duda no ayudó a las opciones de José Luis Sanz. Tampoco ayudaría a Sanz el hecho de que varios agentes de la Guardia Civil se desplazaran al Ayuntamiento de Tomares para requisar un ordenador, una actuación sospechosamente desproporcionada.

3. Romper el «monopolio de Sevilla». El resultado del congreso extraordinario de Granada que elevó a Zoido a la presidencia del PP-A despertó reticencias territoriales en una parte considerable del partido. El hecho de que tanto la presidencia como la secretaría general fuesen ocupadas por dirigentes sevillanos -y ambas por alcaldes de localidades sevillanas- provocó un malestar poco disimulado en otras provincias, sobre todo en la malagueña.

4. La cercanía física. Quienes conocen bien a Rajoy aseguran que le gusta contar con personas con las que ha trabajado codo con codo, en contacto permanente y cara a cara. De hecho, se apuntó su preferencia por ministros para sustituir a Zoido. Moreno Bonilla trabajó estrechamente con Rajoy cuando era jefe de la oposición y es una pieza importante en el engranaje del palacio de la Moncloa.

5. Estrategia de voto. Si Javier Arenas hubiese obtenido los resultados que las encuestas auguraban en la provincia malagueña, hoy sería presidente de la Junta de Andalucía. Este dato objetivo está probablemente en la cabeza de los analistas demoscópicos del partido y podría haber influido para que Rajoy se haya decantado por Moreno Bonilla, malagueño de nacimiento y con quien se confía en movilizar el voto oriental.

6. Errores de estrategia. Algunos dirigentes populares han apuntado que la insistencia de Zoido y Cospedal en presentar a Sanz como candidato «in pectore» ha perjudicado a éste, dada la aversión de Rajoy a que le dicten soluciones desde fuera, tal y como demostró en noviembre cuando frenó el proceso alegando que «a mi no me impone nadie un calendario».