La ambulancia medicalizada tardó más de una hora en llegar al muelle de Sotogrande

Durante la investigación ha quedado demostrado que la dotación de la Patrullera Águila 4 alertó del accidente a su centro de control de forma casi inmediata, incluso antes de cumplirse el primer minuto. La rapidez se debió a que la tripulación de esta embarcación vio cómo caía el aparato de sus compañeros al mar y lo comunicaron antes de dar la vuelta y aproximarse al lugar del suceso.

El centro de control avisó en el acto a Salvamento Marítimo, que activó una embarcación y un helicóptero de rescate también un minuto después de recibir esa comunicación. La aeronave despegó apenas quince minutos más tarde, lo que supone un tiempo de respuesta muy rápido. La decisión de cancelar la misión de este aparato fue adecuada, según la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (Ciaiac), porque se constató que el tiempo que iban a emplear en alcanzar a la patrullera del SVA y evacuar al agente herido era mayor que el que tardaría dicha embarcación en llegar al puerto más cercano, en este caso el de Sotogrande.

También se avisó en un tiempo razonable, doce minutos después de comunicar el accidente, a Salvamento Marítimo y al Servicio Aéreo de Rescate del Ejército del Aire, aunque alfinal no fue preciso que este servicio activara medios auxiliares porque tampoco habrían podido contribuir acelerar el traslado del agente de Aduanas.

La tripulación de la patrullera de Vigilancia Aduanera puso rumbo hacia el puerto de Sotogrande y durante todo el trayecto practicaron a su compañero maniobras de reanimación cardiopulmonar. Una vez atracada la embarcación, entre varios de los presentes lo llevaron al muelle en una camilla tipo tijera que facilitóel conductor de una ambulancia no medicalizada. Ya en tierra, que continuaron en el muelle con la ayuda de agentes de la Guardia Civil Protección Civil. Estos trabajos se prolongaron durante más de una hora.

«Los servicios de emergencia de la Junta de Andalucía (Sala 112 de Cádiz) fueron alertados a las 2.15 por el Centro de Coordinación y Salvamento de Tarifa, es decir, treinta minutos después de que desde la patrullera se comunicara el accidente y la ambulancia medicalizada, con personal sanitario especializado, fue activada justo a esa misma hora mediante llamada al 061», precisa el informe de la comisión.

«No obstante –continúa el documento de la Ciaiac– llegó al puerto a las 3.19, es decir 64 minutos después de que fuera activada y 26 más tarde de que hubiera llegado la patrullera del SVA, que lo había hecho a las 2.53 horas. Se desconoce el motivo por el que tardó más de una hora en llegar».

La ambulancia no medicalizada, por su parte, que había sido activada a la misma hora que la anterior, tardó en llegar al puerto 45 minutos, un cuarto de hora menos.

A la vista de todos estos acontecimientos la comisión investigadora hace una recomendación específica a la Junta de Andalucía para que «realice una investigación exhaustiva para averiguar si la activación de las ambulancias y su llegada al puerto de la urbanización de Sotogrande fue ajustada a los tiempos de respuesta estándar o sufrió alguna demora no justificada».

Llama la atención que la víctima mortal, José Luis Domínguez Iborra, no tuviera certificado médico alguno a pesar de que su actividad laboral era de riesgo.