Los aficionados catalanes llevan al TC la abolición de la Fiesta

En el punto de vista de la Federación, que agrupa a la práctica totalidad de peñas y clubs taurinos existentes en las cuatro provincias catalanas, está la presentación de un recursos de anticonstitucionalidad. Entienden los representantes de los aficionados que lo que «marca la Constitución debe regir en todo proceso democrático» y por ello la primera pretensión es «ver si la decisión adoptada por el Parlante es o no constitucional».

En este sentido, ayer mismo anunciaron que se van a emprender dos caminos de forma simultánea para plantear el recurso ante el TC. Por un lado, a través del Defensor del Pueblo, y por otro con el apoyo de cincuenta diputados o senadores que «son los que también tienen potestad para llegar al Tribunal».

Fuentes de la Federación confirmaron ayer que tienen la esperanza de que al menos haya cincuenta diputados y senadores, «de todos los colores políticos» que se comprometan de esta forma con la Fiesta; «se trata simplemente de hacer llegar la voz de la afición catalana ante el Constitucional» y por ello les parece que involucrar a los aforados en la defensa de la Fiesta no va a ser «difícil», al menos entre los cargos electos del PP que «han mostrado siempre un apoyo inequívoco al espectáculo taurino».

La Federación de Entidades Taurinas de Cataluña va a pedir igualmente una audiencia al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para hacer «llegar el malestar por un sentimiento de coacción de la libertad». A juicio de los responsables de las asociaciones taurinas de Cataluña, Zapatero podría presentar un recurso contra la prohibición, pero «como no es aficionado y hasta la ha fomentado, seguro que no lo va hacer».

Para la Federación, estas medidas van a tomarse dentro de los plazos establecidos por la ley, «ya que el mes de agosto no es hábil y por tanto el próximo primero de septiembre legalmente sólo habrán pasado dos días desde la decisión del parlamento catalán». El plazo para presentar un recurso de inconstitucionalidad termina el 30 de octubre y desde la plataforma taurina aseguran que no quieren agotar ese tiempo. «No damos nada por perdido. Confiamos en que los tribunales juzgan de acuerdo al derecho y no a la política, como han hecho los diputados catalanes».

La iniciativa de la Federación de Entidades Taurinas de Cataluña se suma a la de las figuras del toreo que han solicitado una entrevista tanto con el presidente Zapatero como con la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde. El objetivo es dejar de depender del Ministerio de Interior y pasar al de Cultura, es uno de los pasos en la contraofensiva a la prohibición en Cataluña y para evitar que el movimiento antitaurino se expanda por España.

A nivel político, el Partido Popular ha reiterado que llevará una moción al Congreso de los Diputados para que las corridas de toros sean declaradas de Interés Cultural General, lo que blindaría la Fiesta de prohibiciones autonómicas.

En el País Vasco

Por otra parte, ayer, el presidente del Partido Nacionalista Vasco, Iñigo Urkullu, se refirió al debate sobre la abolición de las corridas de toros como una «cuestión compleja», y si bien aseguró que no le gustan los toros, afirmó que «la prohibición no es la vía». A juicio de Urkullu, este asunto «necesita una madurez» y, por tanto, «poco a poco la sociedad se pronunciará». Mientras tanto, el alcalde Bilbao, Iñaki Azkuna, también del PNV, aseguró que asistirá a las corridas de la feria bilbaína e insistió en que se trata de un espectáculo, a la vez que consideró que «el problema en España es que se ha hecho mucho esencialismo».