España avalará a Túnez un crédito de 300 millones para financiar su transición

El nuevo primer ministro tunecino ha calificado a España de país "amigo" desde hace siglos y ha confiado en que contar con su apoyo también el futuro.

Fuentes del Gobierno han señalado que en la entrevista entre ambos dirigentes, Zapatero se ha vuelto a mostrar favorable a la aplicación de un "Plan Marshall" para ayudar a los países árabes y ha subrayado que una parte sustancial de los 12.000 millones que el Banco Europeo de Inversiones va a destinar al desarrollo del Magreb deberían recaer en Túnez.

El jefe del Ejecutivo ha trasladado a las nuevas autoridades tunecinas su apoyo y ha valorado muy positivamente la legalización del partido islamista, que ha equiparado a la del Partido Comunista en España, que facilitó la transición.

España es partidaria de que las próximas elecciones en Túnez sean legislativas y no presidenciales, sin diatribas ni ganadores, para lograr el máximo consenso en el país necesario en este momento, según han reconocido oficiosamente fuentes del Ejecutivo.

Zapatero se ha referido también a la marea humana llegada a la frontera tunecida por las revueltas árabes y ha avanzado que España organiza junto a otros países una operación de traslado a sus naciones de origen de aquellos inmigrantes que trabajan en Libia y quieren abandonar este país.

Posteriormente, Zapatero ha dado una rueda de prensa en la residencia del embajador español en Túnez antes de regresar a España en la que ha anticipado que nuestro país avalará una línea de créditos reembolsables de 300 millones de euros en los tres próximos años para Túnez , no de forma directa, sino a través del Banco Europeo de Inversiones (BEI) como respaldo financiero al proceso de transición democrática y económica que debe iniciar ahora éste y otros países del Magreb. Según el jefe del Ejecutivo, "Túnez y los demás países del Magreb necesitan un proceso de apoyo financiero que tiene que tener un ámbito de apoyo público de las instituciones europeas a través de sus entidades financieras y a través de un ámbito privado a través de empresas, mediante una gran coalición de grandes empresas trasnacionales privadas para generar inversiones" en estos países. Zapatero dijo haber comentado a las autoridades de Túnez la posibilidad de, en este periodo de transición, lograr un acuerdo económico y social entre empresarios, sindicatos y Gobierno para "generar más confianza". Preguntado por la grave situación humanitaria que se vive en la frontera con Libia, Zapatero ha considerado ésta la cuestión más urgente y ha destacado que por la llegada de miles de refugiados, ha destacado que España ha sido el primer país, en este sentido, en desplegar su ayuda para los refugiados. Ha anticipado que está a punto de despegar "un segundo avión", además de disponer de barcos para trasladarlos. Según ha explicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores está coordinando estas operaciones con el gobierno tunecino.

"Cada país hace su historia, cada pueblo construye su democracia y lo que espera de los pueblos amigos es comprensión y ayuda. No vamos a decir nada que suponga dar una lección, pero vamos a dar todo aquello que nos pidan para que los tunecinos se sientan libres, ganen su dignidad democrática y vivan en una sociedad plural en un Estado de Derecho", ha subrayado en su última rueda de prensa de este giro en la que ha adoptado un tono casi épico. "Europa será más Europa si se comporta bien con el sur", ha enfatizado, y ha deslizado su particular recomendación -con nuestra transición "reciente"-: los países del Magreb deberían enfilar su Constitución patentando la separación de poderes y de la Religión y el Estado. "El Estado debe ser aconfesional, no se debe mezclar, la Religión está en el ámbito de lo privado. Esta separación hace más duradera, auténtica y fuerte la democracia" , se ha reafirmado.