Los secesionistas indultados por Sánchez se exhiben con los fugados de la Justicia

Las dos visitas al extranjero sirvieron a los líderes independentistas para reclamar, una vez más como cada día, la amnistía y la autodeterminación de Cataluña , es decir, que queden impunes las condenas y las faltas cometidas por los secesionistas y que el Gobierno considere la región como sujeto político diferente al conjunto de España. «La amnistía y la independencia no solo son un derecho, son un deber; es la única manera de que los ciudadanos puedan vivir en un país de libertades y justicia», apuntó Junqueras, que tras visitar a Rovira se vio con Anna Gabriel , la exdiputada autonómica de la CUP protagonista, también, de los hechos de 2017 y que, como la número dos de ERC, se fugó a Suiza.

«¡Qué emoción! Tanto tiempo y tantas cosas que han pasado. ¡Este sí es un reencuentro de verdad! No pararemos hasta que lo hagamos juntos en Cataluña, que es donde por justicia toca. Contigo, presidente Carles Puigdemont, y con todos los exiliados y represaliados», apuntó, por su parte, Turull en su cuenta de Twitter, ayer, para celebrar la visita a Bélgica. Tanto unos como otros llevaban casi cuatro años sin verse, desde que Puigdemont, empujado en parte por la presión de Junqueras y Rovira, decidió declarar la independencia de Cataluña en octubre de 2017. Casi cuatro años después, indultados y fugados se exhiben gracias a la decisión del presidente Sánchez.

Y el jefe del Ejecutivo ayer, en el Palacio de la Moncloa , mantenía el equilibrio entre su apuesta por las medidas de gracia, que volvió a defender como parte de su «agenda del reencuentro», y la rotundidad con la que prometió el miércoles que «nunca jamás» respaldará un referéndum de autodeterminación en Cataluña.

En una comparecencia conjunta con el secretario general de la ONU, António Guterres , Sánchez defendió el «diálogo dentro de la ley» y la necesidad de «llegar a un acuerdo» en la mesa de diálogo , que se reunirá la tercera semana de septiembre . Lo que no aclaró, como tampoco hizo el día anterior la vicepresidenta Carmen Calvo , es si el Ejecutivo aceptaría un referéndum consultivo en la comunidad autónoma.

«Todo aquello que separa a la ciudadanía, que le obliga a tener que definirse en uno u otro sentido en cuanto a sus identidades, a mí me parece que lo que hace es socavar precisamente aquello que nosotros queremos dejar atrás», se limitó a decir, con unas palabras muy similares a las pronunciadas en su comparecencia de esta semana en el Congreso .

También Guterres habló sobre la cuestión catalana , aunque la abordó con la mayor neutralidad de la que pudo hacer acopio, relegando el asunto a un tema de «política interna» de un Estado miembro sobre el que no debía opinar. No obstante, preguntado sobre los indultos a los presos del 'procés' , Guterres abogó por el diálogo como un «elemento esencial para solucionar los problemas». «La creación de condiciones para que el diálogo pueda fructificar es siempre algo muy importante en nuestras sociedades», zanjó, ante la atenta mirada de Sánchez, sin citar expresamente las medidas de gracia a los sediciosos.