Urkullu ve «urgente» que la izquierda abertzale «asuma el daño causado a las víctimas»

Tal y como ocurrió el lunes en su entrevista con Paxti López , el líder nacionalista ha defendido ante Zapatero la derogación de la actual Ley de Partidos, la ejecución de una política penitenciaria «flexible, dinámica y consensuada» y la revisión de la legislación penal excepcional, en referencia a su petición de que el presidente del Gobierno se plantee.

Urkullu, que ha dicho que Zapatero «comparte que estamos en un nuevo tiempo y que hay que ir trabajando por la superación» del antiguo escenario de violencia, ha indicado que las medidas para los presos de ETA deberían empezar «al menos, por el acercamiento de los presos etarras en situación de enfermedad» antes del 20-N, según informa Gabriel Sanz .

El líder del PNV no ha querido dar detalle de las respuestas de Zapatero, remitiéndose a la comparecencia del ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui , pero sí ha adelantado que ha señalado que ha visto a Zapatero «muy satisfecho» con la situación actual. «Es un hombre de Estado que quedará para los anales de la historia», ha apuntado tras la reunión de hora y media mantenida en La Moncloa.

Sobre la flexibilización de la política penitenciaria para los presos de la banda terrorista, Urkullu ha reconocido que no es algo que haya que hacer «a la carrera», antes de las elecciones generales, y que el cese de la violencia por parte de ETA «se ha decretado de forma unilateral y sin contrapartidas», y que «no tienen ni van a tener (por ello) contrapartidas políticas».

El presidente del PNV ha llegado solo al Palacio de La Moncloa a las 10:00 horas, seis días después de que ETA anunciara el cese definitivo de su actividad terrorista. Zapatero, que no ha salido a recibirle, ha posado después para los medios gráficos en el interior de la residencia.

Según han informado fuentes del Gobierno, esta reunión estaba prevista desde hace tiempo en las agendas de ambos para poner en valor la relación que han mantenido el Gobierno y el PNV a lo largo de esta legislatura , centrada en la lucha contra la crisis económica.

Urkullu, como avanzó el pasado lunes tras reunirse con el lehendakari, Patxi López , iba a La Moncloa con peticiones muy concretas sobre la derogación de la actual ley de partidos o la flexibilización de la política penitenciaria, con el objetivo de fondo de avanzar en el proceso final de la violencia y de normalización política.