Un relato escrito con renglones de humillación

Corren tiempos difíciles para las víctimas del terrorismo. Y aunque ya parezca una frase hecha, ahora cobra más sentido que nunca. Los acercamientos semanales de presos de ETA que se nos comunican en la AVT, que han llegado a la friolera de 103, están provocando no sólo un estado de desolación en las víctimas del terrorismo, si no también una sensación total de abandono y humillación muy difícil de reconducir. Porque me gustaría recordarles a todos, que detrás de todas las cifras, hay personas. Hay miles de familias rotas que en su momento tuvieron que afrontar la noticia de que su ser querido había sido asesinado, y ahora tienen que asimilar la de que su verdugo va a ser «premiado» y va cumplir condena en una prisión cercana a su domicilio.

Según parece, todos estos movimientos responden a la necesidad de aprobar unos Presupuestos Generales del Estado que sin duda estarán manchados de sangre. Porque una vez más, se está utilizando a las víctimas del terrorismo para hacer política. El Partido Socialista va a permitir que un partido que no ha condenado la violencia, que ha admitido en más de una ocasión que quiere vaciar las cárceles, y que manda abrazos y besos al terrorista Josu Ternera y a su familia en cuanto tiene ocasión, se convierta, como afirmó el Vicepresidente Segundo del Gobierno, en parte de la dirección del Estado. Que están consiguiendo ahora lo que no consiguieron matando se hace cada vez más evidente, y que las víctimas del terrorismo nos sentimos cada vez más indefensas, también. ¿Por qué durante el Estado de Alarma decretado por la pandemia el hijo de la sanguinaria Anboto puede desplazarse a prisión a visitar a su madre etarra mientras que las víctimas del terrorismo no podemos ir a poner flores a los cementerios? ¿Qué Justicia es esta, Señor Sánchez?

Cambiando presos por presupuestos, no sólo se da rienda suelta al todo vale en este país. También se contribuye a que el relato del terrorismo que se empezó a escribir con renglones de sangre, hoy se escriba con los renglones del dolor y la humillación de las víctimas del terrorismo por la traición de este Gobierno. Un Gobierno cuyo Presidente no nos ha recibido jamás, y con un Ministro del Interior que ya no quiere saber nada de nosotros a pesar de que llevamos reclamando poder reunirnos con él desde que comenzó esta sangría de acercamientos.

Aunque es muy doloroso saber que se está premiando a los verdugos de los nuestros sin ni siquiera haber colaborado con la Justicia, en nuestra opinión, único síntoma de verdadero arrepentimiento, lo es aún más no saber qué derroteros va a tomar está situación. Hay que recordar, que no quieren a los terroristas cerca, los quieren libres. ¿Será esta la próxima condición que le ponga Bildu al Gobierno? La verdad es que estamos realmente aterrorizados por los derroteros que pueda tomar esta situación. Pero no duden, que pase lo que pase, tendrán a la AVT enfrente. Si tenemos que tomar las calles, lo haremos. Si tenemos que protestar frente al Congreso como ya hicimos el pasado 27 de junio, lo haremos. Nunca, y digo NUNCA, dejaremos de luchar por la Verdad, la Memoria, la Dignidad y la Justicia de las víctimas del terrorismo. Por ellos, por todos.