PSOE y Unidas Podemos vetaron la bajada del IVA a las mascarillas dos horas antes de su anuncio

Los argumentos del veto fueron estrictamente recaudatorios. «Una bajada del IVA como la que propone Ciudadanos supone una disminución de ingresos para el Estado. Si se supone un consumo diario de 50 millones al día de mascarillas, el coste anual de la rebaja del tipo del 21 por ciento al 4 por ciento supondría 1.568 millones de euros de menor recaudación al año . Por todo lo detallado anteriormente, la aprobación de estas enmiendas supondría un aumento de gasto o una disminución de ingresos presupuestarios, por lo que el Gobierno no presta su conformidad para su tramitación», reza el documento remitido por el Ministerio de la Presidencia al Congreso, al que ha tenido accceso ABC.

El Ejecutivo apoyó su veto en que el artículo 134.6 de la Constitución le faculta a rechazar cualquier medida que suponga un aumento del gasto o una disminución de los ingresos presupuestarios. Una fórmula que el Gobierno de Mariano Rajoy utilizó frecuentemente para frenar ofensivas del PSOE o Unidas Podemos, y cuyo uso criticaban estos dos grupos con dureza entonces. La Mesa de la Cámara tiene la capacidad de aceptar o rechazar las disconformidades del Gobierno, pero ayer la mayoría que componen PSOE y Podemos aceptó estos argumentos.

La bajada del IVA de las mascarillas supone así una rectificación del Ejecutivo en todos los sentidos. Tras negar durante meses que pudiera llevarse a la práctica, Montero se vio forzada a anunciarla al desmoronarse su coartada jurídica. En la tarde del martes, la Dirección General de Fiscalidad y Unión Aduanera de la Comisión Europea respondía a una consulta previa de Hacienda asegurando que «la normativa comunitaria vigente ampara una reducción del IVA a las mascarillas vendidas a particulares».

Este mensaje descabalgó completamente al Gobierno. Esa misma mañana Montero había asegurado que la consulta a Bruselas se había producido «no porque el Gobierno de España tenga dudas, sino para acallar a los que no están diciendo la verdad», en alusión a las reclamaciones de PP, Cs y Vox sobre la bajada de la tasa. La respuesta comunitaria le obligó a cambiar el paso tan súbitamente que no solo se quedaron descolgados los representantes de la coalición en la Mesa del Congreso sino también la propia portavoz parlamentaria socialista. En la mañana de ayer, Adriana Lastra mantenía la ilegalidad de la medida y acusaba a Italia de quebrantar la ley por retirar el IVA de las mascarillas.

Para justificar todo este dislate, Montero ofreció la versión de que el Gobierno quiso esperar a tener «garantías por escrito» de Bruselas respecto a que no abriría un procedimiento de infracción contra España por tocar unilateralmente el IVA. Sin embargo, en abril el Ejecutivo comunitario ya había trasladado a los estados de la Unión que no iría en contra de esta medida.

La bajada del IVA de las mascarillas se aprobará el próximo martes en el Consejo de Ministros mediante un real decreto-ley que, lógicamente, supondrá una reducción de los ingresos. El Ejecutivo también rebajará el precio máximo de venta.