Los presos de ETA concluyen la farsa de su ayuno por Bolinaga

Los reclusos consideran «modélica» la supuesta protesta, que como se ha venido descubriendo, ha constituido en no acudir al comedor del centro penitenciario y, a escondidas, dar buena cuenta de las viandas adquiridas en el economato o suministradas por los familiares , que ocultaban bajo el colchón de sus celdas. Otros mantuvieron la abstinencia apenas 24 horas y no ha faltado quien, como Arnaldo Otegi, desayunó fuerte para aguantar el resto del día sin ingerir alimento. Pero la mayoría de los internos de la banda, simplemente pasaron de parodias y simulacros. Los presos ya adelantaron que abandonaban la supuesta huelga de hambre una vez que le fue concedido el tercer grado al secuestrador de Ortega Lara. Sin embargo, tras el recurso del fiscal, ninguno de ellos ha vuelto a ayunar para presionar a favor de su excarcelación.

Pese a la farsa manifiesta, los reclusos de ETA aseguran en «Gara» que su protesta ha servido para situar en el primer plano «la necesidad de solucionar el problema de los presos» y que también ha «puesto en evidencia la responsabilidad de los estados (español y francés)». El colectivo de presos etarras aprovecha el comunicado para hacer un llamamiento a reforzar el «proceso impulsado en la Declaración de Ayete, porque eso es lo importante, en eso hay que poner las fuerzas. Nos negamos a caer en la trampa del enemigo».