La Policía mantiene a Adlbi «encartado en la investigación» por yihadismo en la que fue detenido

Las actuales investigaciones están siendo seguidas en una pieza separada y secreta en el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional, informa Isabel Vega. La captura de Adlbi, de 74 años, fue llevada a cabo por agentes de la Comisaría General de Información (CGI) de la Policía Nacional la noche del miércoles como inicio de esta segunda fase, y apenas dio tiempo a dos arrestos más antes de que la actuación fuera desvelada a mediodía de ayer por la web de El Confidencial.

En ese breve intervalo, con el presidente de la Comisión Islámica «se hicieron gestiones» en la mencionada comisaría, según indicaron a este diario fuentes del Cuerpo, y no fue puesto a disposición del juez, con lo que posteriormente fue dejado en libertad sin cargos. Sí tiene la obligatoriedad por fórmula «de comparecer ante la Autoridad Judicial cuando sea requerido para ello» . A pesar de ello, Mohamad Ayman Adlbi «sigue encartado en la investigación», añadieron las mismas fuentes. A los otros dos arrestados se les seguía tomando declaración por la tarde.

La CIE fue creada en virtud del cumplimiento del Acuerdo de Cooperación que España firmó en 1992 con los musulmanes. Adlbi fue elegido para encabezarla tras la muerte por Covid de su antecesor, Riay Tatary, y sólo unas fechas después de haberse convertido en líder de una de las asociaciones integradas en esa Comisión con mayor peso, la Ucide, Unión de Comunidades Islámicas de España, donde se dice que desempeñó una notable labor de carácter social.

El entramado delictivo con el que supuestamente tendría que ver la detención de este representante remite a la gestión en España de negocios legales del ámbito de la alimentación, el motor o el transporte de mercancías de cuyos beneficios se detraían unos fondos a modo de caja B, que eran trasladados a manos de grupos radicales en Siria a través de correos humanos, en fondos ocultos de maletas, remesas o la 'hawala', sistema tradicional de envío de dinero no regulado utilizado en la órbita árabe.

En el epicentro de esta enorme tapadera se situó a la familia Kutayni, afincada en Algete, que llegó a España en la década de los 80 huyendo del régimen de Hafed Al Assad y uno de cuyos cuatro hijos cumplió pena en Damasco por un atentado perpetrado en esa ciudad en 2008 en la que murieron 17 personas.

Las investigaciones policiales determinaron también la presencia en esta célula de Mohamed Galeb Kalaje, que había estado encarcelado nueve años hasta 2006 igualmente por acciones de corte yihadista. En concreto, fue condenado por su integración como tesorero en la célula encabezada por el entonces líder de Al Qaeda en España, Imad Eddin Barakat Yarkas, alias Abu Dah Dah, a quien se cree inspirador e instigador del 11-M.

Los encausados de la operación Wamor se enfrentan a los delitos de pertenencia a organización criminal, colaboración con organización terrorista, financiación del terrorismo, blanqueo de capitales, fraude fiscal, falsedad documental y favorecimiento de la inmigración ilegal.