UGT pide que dejen de volar los helicópteros del Servicio de Vigilancia Aduanera por seguridad

La petición del sindicato se produce después de que la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (Ciaiac) difundiera el 14 de marzo un documento con sus recomendaciones tras el accidente sufrido el 11 de julio de 2021 por uno de los aparatos de Aduanas en aguas de Cádiz cuando perseguía a una embarcación de unos narcotraficantes. En el suceso murió el funcionario que hacía de observador.

El documento explica que el accidente se produjo cuando el aparato volaba por debajo de los 100 pies de altitud ( poco más de 30 metros ) e introdujo la parte trasera en el agua. Eso provocó el vuelco de la aeronave hacia el lado derecho, para después darse la vuelta y quedar flotando.

Según la Ciaiac, esa operación «no estaba contemplada en el Manual de Operaciones de Eliance vigente en ese momento»; es más, según otras fuentes, ni siquiera ese manual había sido elaborado por la adjudicataria de la gestión de la flota de helicópteros de Vigilancia Aduanera, sino que se utilizaba el de la anterior empresa que se ocupaba de dar el servicio.

«En la actualidad –explica el informe– Eliance Helicopter Service continúa operando para el Servicio de Vigilancia Aduanera, no teniendo constancia de que su manual de operaciones haya sido modificado y aprobado para contemplar este tipo de operaciones». Por ello, le insta a que lo haga y a que suspenda «todas las actividades relacionadas con el servicio demandado por el SVA que impliquen la realización de operaciones no recogidas en su manual» en tanto este documento no sea actualizado.

Una operación no recogida en el manual de operaciones, según fuentes del sector aeronáutico consultadas por ABC, puede ser considerada ilegal, y acogerse a ello los seguros para no pagar. El sindicato UGT, en una carta enviada al director general de la Agencia Tributaria el pasado 3 de abril, a la que ha tenido acceso ABC, da cuenta de una reunión del Comité de Seguridad y Salud Intercentros (CSSI) celebrada el 30 de marzo.

En ella, los responsables de Vigilancia Aduanera explicaron que en principio, todo apuntaba a que el accidente no se produjo por un fallo mecánico, sino a un «fallo humano, problemas de formación, etc. Además, informaron de que el funcionario podría no llevar el casco y no les consta que fuera con el cinturón de seguridad abrochado por lo que pudo sufrir un golpe con el techo del helicóptero al producirse el volcado de éste, lo que podría haber ocasionado que perdiera el conocimiento».

El sindicato se queja en la carta de que no sabe «de dónde han sacado los representantes de la Vigilancia Aduanera la información dada respecto al hecho de que no se trata de un fallo mecánico y que todo apunta a un fallo humano cuando todavía no se ha publicado el informe definitivo en el que se detallan las causas del accidente y a qué se refieren con los problemas de formación«

«Tampoco sabemos -añade la misiva- de dónde ha surgido la información de que el funcionario fallecido pudiera no llevar el casco reglamentario y del hecho que no llevara el cinturón de seguridad abrochado, ya que esta situación también se podría haber producido en el momento en el que intentara abandonar el helicóptero al producirse su hundimiento en el agua». Y se queja el sindicato de que en la reunión no se les trasladase el documento de recomendaciones de la Ciaiac, a pesar de que lleva fecha de 14 de marzo; es decir, 16 días antes de que se produjera la reunión.

UGT, por tanto, exige que se les informe de cómo los responsables de Aduanas han tenido conocimiento de que el accidente se debió a un fallo humano cuando aún no hay un informe definitivo de la Ciaiac, y de si el funcionario que resultó muerto había hecho los cursos de seguridad necesarios para poder reaccionar en una situación como la que se produjo esa noche. Y ello porque de no haberlo hecho hay que saber quién ordenó que subiera al aparato en esas condiciones.

Además quiere saber quién ordenó al piloto volar por debajo de los 100 pies y saber por qué los responsables de Vigilancia Aduanera sostienen que la víctima no llevaba puesto el casco ni tenía abrochado el cinturón de seguridad, cuando el siniestro aún está inmerso en una investigación judicial de alcance indeterminado.

La adjudicación de la gestión de la flota de helicópteros de Vigilancia Aduanera a Eliance estuvo rodeada de polémica desde el principio . Primero hubo un recurso de una de las empresas competidoras, y luego la empresa tardó meses en poder dar el servicio. Que ahora haya que modificar el manual de operaciones, tal como pide la Ciaiac, podría indicar, según fuentes del sector aeronáutico consultadas por ABC, que hubo precipitación en la decisión.

Además, las mismas fuentes consideran que se está intentando trasladar toda la responsabilidad del accidente al piloto y al funcionario fallecido , quedando eximidas de ella la empresa adjudicataria y la propia administración.