Navarra Suma desarma a Chivite con el argumentario de Bildu

Esparza ha leído la carta que escribió hace unos días Jose Mari Esparza, jefe de la editorial abertzale por antonomasia, Txalaparta, y una de las figuras ideológicas de la izquierda abertzale, para justificar la abstención de Bildu en la investidura de María Chivite. «Para Navarra, y por lo tanto para Bildu , es menos malo un gobierno cuatripartito que uno de PSN y UPN», «por primera vez en 30 años, el Régimen está dividido», «Bildu se queda libre para todo, para recordar todos los días a Txibite (el autor lo escribe así) y a sus comandatarios que están ahí por nuestra voluntad, para advertir que no habrá ningún cheque en blanco, para dar luz verde o roja a todo cuanto apoye o contradiga el cambio iniciado en 2015. Txibite tendrá que dejar su chulería madrileña y se sentará a hablar», «porque Bildu va a aprovechar esa privilegiada situación para hacer la oposición y se va a cobrar en el Parlamento navarro cuantos agravios le han hecho hasta ahora».

Y claro, ante estas afirmaciones, la socialista María Chivite se ha quedado sin argumentos. Lo único que pudo hacer es sacar una estadística en la que afloraban las coincidencias en voto que se han dado entre UPN y Bildu a lo largo de la pasada legislatura. «En un 51% de las iniciativas legislativas coincidieron con Bildu», aseguró Chivite. La respuesta de Esparza ha sido clara, «una cosa es coincidir en aspectos de gestión y otra cosa es hacerla presidenta». Pero Chivite ha eliminado el verbo «coincidir» al afirmar que «ustedes votarán muchas veces con Bildu, porque eso forma parte de la normalidad política».

Sin embargo, Esparza también ha echado por tierra el argumento de la normalidad política. Ha recordado a la candidata socialista que en 1998 y en 2001 fueron asesinados sendos concejales de UPN y María Chivite va a gobernar con el beneplácito de una formación que ni entonces bajo el nombre de Batasuna ni ahora con la denominación de Bildu ha condenado aquellos hechos. «Eso no es normalidad», ha insistido Javier Esparza. «Gracias a la bendición del señor Otegi , ese que hace unos días justificó el uso de la violencia, usted va a gobernar».

El resto del enfrentamiento entre los líderes de las dos principales formaciones navarras se ha basado en la defensa de todos los logros obtenidos por los acuerdos entre regionalistas y socialistas que durante años «han permitido el desarrollo económico y social de Navarra» expresado por Javier Esparza mientras que la dirigente socialista se limitaba a explicar que «usted tiene 3 socios y 20 escaños; yo tengo cuatro socios y 23 escaños». Ninguna alusión a la reconocida dependencia de Bildu.