Ninguna sorpresa con su blindaje en la Secretaría General. Sin un sector crítico con fuerza que pudiera hacerle frente, su equipo daba por seguro su triunfo en las primarias menos promocionadas de la historia del partido. Su único rival, Fernando Barredo , que ya se enfrentó a él en Vistalegre II, ha obtenido el 7,8 por ciento de los apoyos (4.503 votos).
Las 89 personas que formaban parte de la candidatura oficialista, «Un Podemos Contigo», han vuelto así a ser elegidas para ocupar una silla en el Consejo Ciudadano Estatal, el máximo órgano de dirección. También se aprueban los documentos Político, Organizativo y Ético defendidos por su equipo, que plantean cambios sustanciales que enmiendan normas fundacionales del partido. Por ejemplo, se eliminan la limitación salarial en los cargos públicos equivalente a tres SMI y la limitación de mandatos para que duren más de doce años si las bases lo aceptan.
Con prisas y casi sin anunciar
«Gracias a todos los inscritos e inscritas que habéis participado en la Tercera Asamblea de Podemos. Es un honor recibir vuestro apoyo. Enhorabuena a los nuevos miembros del Consejo Ciudadano y del Comité de Garantías. Vamos a dejarnos la piel para seguir demostrando que sí se puede», ha escrito el propio Iglesias en Twitter al conocerse el resultado.
La Tercera Asamblea tenía que haberse celebrado el pasado el 21 de marzo, después de que Iglesias, para rentabilizar su entrada en el Gobierno, adelantase un proceso que estaba previsto para 2021. La crisis del coronavirus obligó al partido a paralizarlo todo. Finalmente, la dirección retomó el proceso en plena desescalada.
La celeridad y la falta de promoción hicieron que todo quedase oculto bajo la actualidad sanitaria. Barredo y su candidatura «Nuevo Impulso» denuncian que se procedió así para «invisibilizarles». «Nuevo Impulso» propuso a Iglesias un debate por videoconferencia, pero nunca tuvieron respuesta.
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