El Gobierno se inhibe ante la piscifactoría marroquí que ha ocupado aguas territoriales españolas

No se pronuncia sobre la ocupación de aguas territoriales españolas ni menta a las autoridades marroquíes, pese a que la piscifactoría ha sido instalada con el concurso activo de la Administración alauí, que hace meses libró una autorización a la empresa marroquí.

El Gobierno de Sánchez opta ahora por el silencio, lo que resulta curioso si se tiene en cuenta que, el pasado noviembre, el Gobierno sí consideró que se había producido una vulneración de la integridad territorial de España. Solo eso justifica que, el 24 de noviembre, el Ministerio de Asuntos Exteriores informara que había enviado una nota verbal de protesta a la Embajada de Marruecos en Madrid. Ahora, sin embargo, cuando le ha tocado detallar su posición ante el Congreso, el Gobierno prefiere inhibirse y no considerarse afectado por esta acción , que se produce en medio de la crisis diplomática que arrastran España y Marruecos .

En sus preguntas parlamentarias, el PP pidió al Gobierno que dijera si había sido informado por el Ejecutivo marroquí de la instalación de esa piscifactoría; que detallara «qué medidas» prevé tomar «para defender las aguas territoriales españolas y frenar esta acción de Marruecos»; que desvelara si había hablado de este asunto con las autoridades marroquíes y, en caso afirmativo, con quién. A ninguna de esas preguntas contesta el Ejecutivo de Sánchez en su respuesta parlamentaria.

El Gobierno PSOE-Podemos aprovecha que esa ocupación ha sido realizada con una piscifactoría para decir que es «materia de acuicultura» y que esas competencias «recaen en las Comunidades Autónomas, que son, por tanto, las autoridades competentes a la hora de autorizar dichas instalaciones».

Esta interpretación oficial que ahora hace el Gobierno de Sánchez contrasta también con la propia condición de las islas Chafarinas, sobre las que el Estado ejerce una gestión y control especialmente directos, a través del Ejército y del Organismo Autónomo Parques Nacionales. Estas islas son una reserva natural bajo control militar .

Las Fuerzas Armadas cuentan con un destacamento en este pequeño archipiélago, precisamente para defender su carácter estratégico y su sensible posición ante Marruecos, que reivindica esas islas como propias.Por su parte, Parques Nacionales actúa en la gestión de este espacio de destacado valor medioambiental y de su entorno marítimo.