El Gobierno español, «en alerta» por el coronavirus

La política socialista ha explicado también que el Ejecutivo está poniendo a la ciudadanía «al corriente de lo que sucede» y ha expresado su confianza en que la pandemia «esté en retroceso».

De momento, la oposición también ha querido enviar un mensaje de tranquilidad y ha optado por no introducir la pandemia en la refriega política. Desde el PP, la portavoz en la Cámara Baja, Cayetana Álvarez de Toledo, ha dicho que su partido no va a «entrar a jugar con alarmismos ni desidias» y ha respaldado al Gobierno en la gestión de esta crisis . «Nos jugamos muchísimo, no solo en la salud sino en los efectos que puede causar el alarmismo en sectores como el turismo», ha advertido.

Desde esa posición, ha defendido el respeto a los protocolos establecidos aunque sí ha querido cuestionar la participación del ministro de Sanidad, Salvador Illa, en la reunión de la mesa de negociación entre el Gobierno y la Generalitat que tendrá lugar mañana por la tarde en La Moncloa. «Quizás el ministro de Sanidad donde tiene que estar no es en la mesa de negociación con el separatismo», ha atizado.

En línea similar, el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha considerado que en este tema no caben los «intereses partidistas» y ha optado por desear «que el Gobierno lo haga bien, se pongan los controles necesarios y que en España no se extienda como se está empezando a extender en otros países».

Sin embargo, el presidente de Vox ha roto esta aparente neutralidad al exigir vía Twitter. «Aún ni se toma la temperatura a los viajeros procedentes de China o Italia. Están tan empeñados en derribar fronteras que ni siquiera se ponen medidas mínimas que dicta el sentido común», ha cargado.

Espinosa de los Monteros ha intentado después no avivar la polémica y nadar entre dos aguas para mantener la coherencia con sus declaraciones previas. Así ha considerado que todas las medidas que adopte el Gobierno para velar por la salud de los españoles le parecerán «buena idea» y «necesarias».

Por su parte, el portavoz de Cs, Edmundo Bal, ha anticipado el apoyo de su partido al Gobierno socialista ante esta crisis aunque ha advertido que Sanidad no debe lanzar el «mensaje de que aquí no pasa nada» porque «tenemos un montón de personas que han estado en Italia». «Estaremos a su lado y vigilaremos que se tome con la suficiente seriedad» , ha avisado, informa Juan Casillas.

Y si los partidos de la derecha han optado por no utilizar esta amenaza sanitaria como arma política contra el Gobierno, más aún sus socios . El portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha destacado la «buena coordinación» existente en el sistema sanitario y ha querido enviar un mensaje de tranquilidad una vez que los posibles casos «se han examinado». A juicio del político vasco, «esta crisis está bien gestionada y todo está preparado por si hubiera que poner algún medio más ».

Por su parte, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha puesto en valor que Illa «desde el minuto uno nos llama, nos informa» y ha hecho hincapié en que el ministro «se está comunicando muy bien» y está buscando el asesoramiento de expertos. «Creo que eso siempre es bueno, confiamos en la gestión del Gobierno y en que se pueda gestionar de la mejor manera posible», ha remachado.