El Foro Social Permanente pide un «desarme completo» de ETA «en un plazo razonable», verificado internacionalmente

Esta nueva red, que se compone de 14 entidades en las que se cuentan sindicatos y organizaciones como Etxerat, Baketik o Sare y de 14 personas y que reivindica el protagonismo de la sociedad civil para conseguir « una paz permanente basada en la justicia », se ha presentado este sábado en un acto público celebrado en el Palacio de Aiete de San Sebastián, con la presencia, entre otros, de los tres miembros del Grupo Internacional de Contacto (GIC) -Brian Currin, Raymond Kendall y Alberto Spektorowski-.

En la presentación han participado, como invitados, representantes de distintas formaciones políticas como el PNV, que ha estado representado por Andoni Ortuzar y Joseba Aurrekoetexea , y EH Bildu con Arnaldo Otegi , Maddalen Iriarte, Pello Urizar, Rebeka Ubera o Bakartxo Ruiz.

Además, han asistido al acto el portavoz de Sortu, Harkaitz Rodríguez , el miembro de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria, así como los parlamentarios de Elkarrekin Podemos Pili Zabala e Iñigo Martínez, entre otros. Los dirigentes sindicales Ainhoa Etxaide (LAB), Adolfo Muñoz «Txiki» (ELA) y Raúl Arza (UGT) también han acudido a la cita, así como representantes de otras organizaciones sociales y sindicales.

En su intervención, el coordinador del Foro Social Permanente, Agus Hernan, ha expresado en nombre de este colectivo su « incredulidad » ante la «actitud obstruccionista» de los gobiernos español y francés que, en su opinión, «no desean acometer el desarme de una manera ordenada».

Asimismo, dentro de lo que ha denominado « bloqueos múltiples », ha criticado la «incapacidad de los partidos de sentarse a dialogar hasta llegar a acuerdos», frente a la «mayor capacidad de diálogo» que sí ha existido en Iparralde (País Vasco francés) como «muestra el Acuerdo de Baiona de 2014».

De este modo, el Foro Social Permanente « ante esta realidad de bloqueos múltiples », se debe acometer «la fase final, que debe desembocar lo antes posible en un escenario de desarme completo mediante la destrucción de los arsenales» de ETA.

A su entender, cinco años después del fin de su actividad armada, ETA «debe emprende un proceso de desarme con la sociedad vasca, sus agentes institucionales, políticos, sindicales y sociales con el resultado de acometer un desarme de carácter total y definitivo».

El Foro considera que para que este desarme pueda desarrollarse en condiciones adecuadas, son necesarias, de una parte, «garantías de seguridad para los intervinientes en este proceso », y de otra, «la participación y colaboración de los responsables institucionales, partidos políticos, agentes de la sociedad civil y comunidad internacional».

Tras el trabajo realizado durante los últimos ocho meses con instituciones, partidos políticos (con reuniones celebradas con PNV, Podemos, EH Bildu, Sortu, PSE-EE, Ezker Anitza-IU, Geroa Bai, Ezkerra-Izquierda y PSN), organizaciones de la sociedad civil y de la solicitud para entrevistarse con el delegado de ETA para la resolución David Pla en la cárcel de París, el Foro ha determinado que hay constancia de que «hay un acuerdo entre todos los actores en avanzar en un proceso de desarme completo mediante la destrucción de los arsenales de ETA».

«Este proceso se debe dar en un plazo razonable y con una calendario acordado. El proceso debe ser internacionalmente verificado , y que dé seguridad de su realización al conjunto de la sociedad vasca, sus instituciones, así como a los estados involucrados», ha añadido.

A su juicio, «la solución solo vendrá desde una articulación de acuerdos entre los tres ejes de una triangulación: las instituciones, la sociedad civil y la labor de la Comisión de Verificación y Monitoreo».

Asimismo, ha pedido a las instituciones y grupos políticos que actúen «con responsabilidad política, buscando más lo que los une que lo que les separa», al tiempo que, como sociedad civil, les han garantizado su apoyo si deciden iniciar un «camino integrador y definitivo». «No tenemos tiempo que perder. Dialoguen, hasta el amanecer si es necesario. Las generaciones futuras no nos lo perdonarían», ha expresado Hernan.

Por su parte, Susana Egia (STEILAS) ha dado los detalles del nuevo Foro Social Permanente, que prosigue la tarea que iniciada por el Foro Social en 2013, y ha criticado el «multibloqueo sufrido por la hoja de ruta de Aiete, especialmente por parte de los estados español y francés», el cual ha dejado el proceso de paz «en una situación complicada».

En esa línea, ha recalcado la necesidad de «multiplicar» la aportación de la sociedad civil y reivindicar su «protagonismo«. Para el Foro Social, a esta le corresponde « cambiar de ritmo , con intención de llegar lo más lejos posible con el proceso de paz«. Por ello, se ha decidido convertir este colectivo en permanente, aunque no con el objetivo de alargar la iniciativa 'sine die'.

«Permanente quiere decir que nuestra iniciativa debe servir para conseguir una paz permanente basada en la justicia«, ha subrayado, al tiempo que ha afirmado que desean «pasar de ser simples actores a ser parte activa en el proceso de pacificación«.

La nueva red se compone de 14 organizaciones (ELA, LAB, CCOO, Steilas, Paz con Dignidad, Sare, Baketik, Etxerat, Gernika Batzordea, Uharan, Bake Bidean, Egiari Zor, Ahotsak, Antxeta Irratia), y de 14 personas (Nazario de Oleaga, Aitzpea Leizaola, Iñaki Lasagabaster, Iñaki González Murua, Oñaki Olalde, Fernando Vaquerizo, José Luis Uriz, Andoni Serrano, Fernando Armendariz, Begoña Uharte, Carlos Aitor Yuste, Juanje Soria, Roberto Oiz y Txemi Pérez).

Según ha explicado Egia, sus integrantes buscan un funcionamiento «de red, horizontal, que busque el acuerdo permanente», por lo que se organizará en cuatro comisiones. Asimismo, han hecho un llamamiento a los interesados a unirse a esta red, en la que «faltan todavía muchas sensibilidades y actores«, para hacer su aportación.

Finalmente, han manifestado su voluntad de construir «una agenda propia e independiente para la paz y para ellos deberemos construir un nuevo lenguaje que desarme la palabra».