La doble gesta del 93º Crucero del buque Elcano

Ambas misiones estaban unidas, pues la existencia de un positivo por coronavirus entre sus 197 hombres y mujeres habría puesto en riesgo el objetivo de rememorar la gesta.

Hoy, 293 días después , se puede decir que Elcano superó su crucero de instrucción más difícil con la misión doblemente cumplida . Todo ello tras ‘tocar’ quince puertos . Durante esas escalas, la dotación se ha mantenido recluida permanentemente a bordo o, excepcionalmente, en algunos puertos donde era posible, ha permanecido en espacios reservados y acotados en tierra para su exclusivo esparcimiento y descanso. Toda una prueba psicológica añadida .

«El buque escuela Juan Sebastián de Elcano ha sido una gran burbuja para evitar que pudiéramos contagiarnos », relatan a ABC los guardias marinas Félix García Ripoll y Marcos Pérez Vilda en conversación telefónica a apenas 38 horas de que arriben hoy al puerto de Cádiz (11.15h) donde a buen seguro les espera el gran abrazo familiar.

Antes, en la tarde de ayer, este bergantín-goleta de 113,1 metros de eslora recibió a un invitado de excepción: Su Majestad el Rey , quien quiso reconocer así la doble gesta del 93º Crucero de Instrucción, comandado por el capitán de navío Santiago de Colsa.

Montevideo (Uruguay), San Julián (Argentina), Punta Arenas y Talcahuano (Chile), El Callao (Perú), Guayaquil (Ecuador) -donde se sumaron los guardiamarinas-, Manzanillo (Méjico), Pearl Harbour y Guam (EE.UU.), Samar y Cebú (Filipinas), Tidore-Ternate (Indonesia), Yakarta (Indonesia), Salalah (Omán) y Souda Bay (Grecia) son las ciudades a las que este buque, que forma a futuros oficiales de la Armada Española, arribó. Durante esta travesía recorrió los principales puertos que avistaron y visitaron el marino portugués y el español hace cinco siglos.

Desde la Armada se quiere subrayar que pese a la pandemia -que ha impedido celebrar la efeméride de un modo más efusivo en cada puerto- «las excepcionales circunstancias señaladas son más que suficientes para que la conmemoración de la hazaña de la Primera Vuelta al Mundo sea puesta en valor para dejar patente la voluntad de la Armada para conmemorar las hazañas de su pasado y su valiosa contribución a la Historia de España, y a la vez el espíritu de servicio y de sacrificio de sus dotaciones actuales».

Hay orgullo en la Armada por esta misión tan especial y compleja. Y en los jóvenes guardiamarinas y su dotación que suplieron la incógnita del «crucero más incierto» con disciplina, superación, espíritu de sacrificio y profesionalidad.

El horario regía la vida a bordo: desde las 6.45h de la mañana en que tocaba la diana; 7.15h una hora para hacer deporte; clases por la mañana hasta que se comía a las 13 h; más estudio y clases; hasta las 18.30; cena a las 19 h y terminando con estudio, deporte o algo de tiempo libre antes de dormir.

La misión primordial del buque escuela Juan Sebastián de Elcano es la de mantener a los guardias marinas en íntimo y constante contacto con la mar, donde están llamados a desarrollar sus principales cometidos profesionales. Estos jóvenes marinos cursan actualmente cuarto curso de su carrera en la Escuela Naval Militar de los diferentes Cuerpos de la Armada.

Construido en 1927 , este buque de cuatro mástiles es una leyenda para la Historia de la Armada Española, que espera celebrar su centenario por todo lo alto dentro de seis años. De momento, hoy, celebrará el buen puerto a su misión más exigente.