La red corrupta de «Junior» se extiende también a Francia
La UDEF investiga una recalificación con un socio que fue político en Perpignan
La UDEF está investigando un negocio de Jordi Pujol Ferrusola en Perpignan que «de confirmarse las hipótesis policiales (...) supondría la involucración del investigado en actos de corrupción urbanística ejecutados en Francia». Se trata de la compra de unos terrenos rústicos -un viñedo- y su recalificación para construir un centro comercial.
La Policía Judicial sospecha que el hijo mayor de Jordi Pujol, que invirtió 900.000 euros, incurrió en blanqueo de capitales, «tanto los invertidos inicialmente en cuanto a su procedencia, como las plusvalías gestadas como consecuencia de llevar a cabo operaciones que presumiblemente serían ilícitas», sostiene el informe entregado al juez de la Audiencia Nacional José de la Mata.
En septiembre de 2006 Pujol Ferrusola transfirió 900.000 euros a la sociedad Parc Saint Julien SARL, representada por Francis Albert Gendre. Este promotor francés había tenido un cargo público en el ayuntamiento de Perpignan que le serviría, según las hipótesis policiales, para lograr la recalificación de los terrenos, «circunstancias indiciarias de conductas asociadas a la corrupción política».
Multiplicar por cuatro
Los 900.000 euros que aportó el hijo de Jordi Pujol le sirvieron para hacerse con el 22,5 por cien de la sociedad. De esa cantidad, 750.000 euros era el coste de los terrenos rústicos. Una vez recalificado el suelo y puesto en marcha el proyecto, este les generaría unos ingresos brutos de 38 millones de euros. Una vez descontados los gastos, el beneficio se situaría, según los cálculos del socio de Pujol Ferrusola, en 17.750.000 euros.
De esta cantidad, 3.993.750 euros corresponderían a Pujol, que multiplicaría por más de cuatro su inversión. En principio Pujol solo habría ganado un 7,7 por cien anual de intereses, porque canalizó la operación como un préstamo, pero la UDEF cree que en realidad se estaba haciendo con el citado porcentaje del «pelotazo» urbanístico. El préstamo sería «ficticio» y con ese proceder ahorrarían impuestos. Solo los terrenos pasarían de 750.000 euros a cuatro millones de euros tras la recalificación.
Efectivamente, en enero de 2007 el Ayuntamiento de Perpignan tramitó el el proyecto, que Francis Gendre se encargó de defender «en calidad de promotor inmobiliario en la Prefectura» y valiéndose del cargo político municipal que ejerció. En julio de ese año se autorizó el proyecto del centro comercial, denominado «Le Carre d´Or» («El Cuadrado del Oro») y en octubre se dio luz verde a la construcción de 47.218 metros cuadrados edificables. El 14 de mayo de 2008, el socio de Pujol vendió los derechos del proyecto al grupo internacional Codic, «curiosamente un día antes de que se ejecute la devolución del préstamo que consideramos ficticio».
La UDEF refleja en su informe que la construcción del centro comercial «ha causado gran controversia social , con la oposición del actual alcalde de Perpignan, que todavía en fechas recientes ha intentado anular de construcción los permisos concedidos inicialmente, basándose en su ilegalidad».
Con esta posición del regidor francés, los agentes españoles no dudan en enclavar esta operación en un caso de corrupción urbanísticam cuya mecánica Pujol Ferrusola habría exportado de Cataluña a la vecina Perpignan. Además, la Policía española sostiene que Francis Gendre sabía de antemano «la tramitación política del expediente y su evolución, dado que el 3 de octubre de 2007 ya conocía que se iba a aprobar el expediente, aún cuando la resolución del alcalde dataría de treces días después, el 16 de octubre de 2007».
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