Correa chantajeaba al alcalde de Boadilla con un vídeo en el que sale contando dinero

Así se desprende de la declaración prestada por Felisa Jordán, denunciante, imputada y ex administradora de Special Events, una de las empresas del entramado de Correa, ante el juez Baltasar Garzón. El presunto cerebro de la trama se jactaba, según Jordán, de tener un vídeo del alcalde de Boadilla del Monte, Arturo González Panero, en el que éste sale contando dinero. «Lo tengo comiendo de mi mano», decía Correa. Y es que, según explica la coimputada, hace unos años el alcalde hizo «una operación de un suelo», de un terreno en Boadilla que, pese a haberse convocado un concurso público, el alcalde adjudicó «a dedo» para «sacarse una comisión», que, según Jordán, se repartirían el regidor y el teniente de alcalde, Miguel Ignacio González. «Entonces -prosigue Jordán- me cuenta (Correa) que se sientan en una mesa y cogen en vídeo al alcalde contando el dinero y repartiéndolo para cada uno (...), y él me dice: «¿no ves con lo tengo con ese vídeo pillado?»; y yo le digo: «¿cómo has podido hacer eso?» (...)».

«Mostrar el vídeo al PP»

Jordán añade que más adelante, Correa «se mosquea» con González Panero porque se negaba a darle una segunda adjudicación y queda con él para hablar del tema. El alcalde no acude a esa reunión y manda a su «segundo», Miguel Ignacio González. Correa no duda en transmitir al teniente de alcalde que como no le den esa segunda adjudicación «van a sacar ese vídeo, se lo van a enseñar al partido y le amenazan». «Entonces Correa literalmente me dice: «Ignacio se caga, se hace caca»».

No era el equipo de Boadilla el único que vivía bajo la presión de que saliera a luz su relación con Correa y su entramado. Al parecer, tras la dimisión de González Panero, el ex alcalde de Pozuelo, Jesús Sepúlveda y el de Sevilla La Nueva, Mario Utrilla (éste no está imputado), también estaban «acojonaditos».

«Están acojonados»

Así lo revela una de las conversaciones que figuran en la parte del sumario cuyo secreto se ha levantado y en la que un trabajador del Ayuntamiento de Pozuelo comenta al ex vicepresidente de Infancia Sin Fronteras -ONG que podría ser una tapadera- que, tras la dimisión de Panero, teme que «le metan también mano al Ayuntamiento de Pozuelo». «Te lo juro, están acojonados. En Pozuelo están que ni tiritan». En otro momento de la conversación afirma: «Al alcalde de Sevilla La Nueva parece que le tiemblan las piernas cada vez que anda».

A juzgar por las declaraciones e informes que constan en la causa, la congoja del alcalde de Pozuelo estaba justificada. No en vano aceptó como regalos «en especie» de la «trama» una pantalla de plasma y un «todoterreno».

En la extensa declaración de la anteriormente citada Felisa Jordán, esta imputada detalla a Garzón la mecánica de regalos de la trama de Correa y no duda en revelar al juez el nombre de los beneficiados por la «generosidad» de «Don Vito». Además de Sepúlveda y de González Panero (el alcalde más veces nombrado), Jordán sitúa al ex viceconsejero de Madrid y diputado autonómico Alberto López Viejo como el «contacto» de las empresas de Correa con la Comunidad de Madrid.

Ella misma reconoce que, a petición de Crespo, mano derecha de Correa, le entregó dos sobres de dinero, cantidades que se sumarían a los numerosos apuntes contables que figuran en la «Caja B» de Serrano (donde se centralizaban todas las operaciones de las empresas de Correa y de donde se sacaba el dinero para «regalos» a autoridades y funcionarios como sustitución de la típica «cesta de Navidad», como dice Jordán). De ahí salió el todoterreno de Sepúlveda o un bolso de más de mil euros para una de las secretarias de López Viejo. Hay referencias a los también aforados Alfonso Bosch y Benjamín Martín Vasco, y al viceconsejero Carlos Clemente.

Desconfianza hacia el PP

Otra de las cuestiones relevantes que declara Jordán es que Crespo desconfió del PP cuando la revista «Interviú» sacó a la luz los negocios turbios de Francisco Correa, lo que propició que «Don Vito» cambiara, por una cuestión de imagen, el nombre de algunas de sus empresas. «Mira, Isabel -le dijo-, todo esto es mentira. Tú no te creas nada; esto es todo para fastidiarnos la vida porque en el partido no nos van a dar más trabajo y son los mismos del partido los que sacan esta información».