Camps afirma que quedan «uno o dos escaloncitos» para demostrar su inocencia

El presidente de la Generalitat Valenciana explicó que «la verdad está más cerca que nunca». Se mostró esperanzado de que en breve haya una resolución, aunque también reconoce que «quedan uno o dos escaloncitos y entonces toda esta cuestión tan extraña, absurda y estrafalaria habrá pasado al pasado».

Camps fue recibido con aplausos por un numeroso grupo de vecinos y estuvo arropado por los principales cargos provinciales del partido. Volvió el presidente del ejecutivo autonómico valenciano a reivindicar el respaldo social que ha obtenido en las citas electorales y subrayó que «la fuerza de la democracia es una corriente tan fuerte que se lleva por delante cualquier cuestión».

Confianza en la Sala

Génova insiste en cerrar filas en torno a él y confía su suerte a la decisión de la Sala de lo Civil y Penal del TSJCV, que tiene que resolver el recurso que presentarán antes de este viernes. Aseguran fuentes populares que el auto sobre Camps «es absolutamente infundado y está basado en las declaraciones del sastre», esto es, de José Tomás, al que llegan a calificar de «sastre falsario». Tras esta reflexión, indican que «si ese es el aparato probatorio, no nos planteamos que Camps se siente en el banquillo».

Lo que les lleva a esa convicción es que «su situación procesal no ha cambiado y por eso mostramos nuestra confianza». Además, admiten que quizá una «Sala completa» sea capaz de «verlo de otro modo».

Lamentan en el PP que José Flors no haya dado ningún valor, dicen, ni a las declaraciones de Camps ni a la de los trabajadores de la empresa textil por lo que entienden que «el auto es muy insuficiente». Es por ello que esperan que se estime la apelación tanto en lo que atañe al fondo como al procedimiento. Al fondo «porque el auto estima que es «probable» que no pagara totalmente sus trajes, pero no puede basarse sobre la probabilidad hipotética», y en cuanto al procedimiento, creen que «no está clara la concurrencia de aforado y jurado».

Además criticaron que la Policía, la Fiscalía y la Agencia Tributaria estén filtrando información «con la intención de perjudicar al PP» y recuerdan que dicha actuación es un delito que, hoy por hoy, nadie investiga.

Sin embargo, en el PP comienzan a oírse voces que vendrían a justificar la recepción de «regalos» sin que éstos tengan por qué considerarse «cohechos». «La cacería que le costó el cargo a Bermejo cuesta más que cuatro trajes», comentaron las fuentes populares, que también dijeron que el valor de esos trajes o «regalos» «es inferior al que reciben políticos, jueces o periodistas».

El PP decidió hacer ayer una declaración pública, leída por su vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, en el que se reitera el apoyo a Camps. También se afirma que dado que hay un procedimiento judicial abierto, «el PP no va a entrar a comentar ni debatir su contenido», lo que suena a cerrojazo informativo. Mariano Rajoy clausurará hoy junto a José María Aznar el VI Campus FAES, donde no es previsible que se refiera ni a Camps ni a otros implicados en la Gürtel como Luis Bárcenas o Jesús Merino. Eso sí, en Génova creen que no habrá dimisiones en las próximas semanas.

Este caso está sirviendo de artillería política contra el PP no sólo ya para los socialistas, sino también para otras fuerzas políticas. La vicepresidenta Teresa Fernández de la Vega criticó al PP por «mirar para otro lado», mientras que el líder de Izquierda Unida, Cayo Lara, volvió a reclamar la dimisión de Camps.