El asesino de Pioz, en una celda de cristal para protegerlo

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Guadalajara ha ordenado a Instituciones Penitenciarias que «extremen las medidas de seguridad para garantizar la integridad física» del reo «respecto a terceras personas y respecto a sí mismo». Es decir, el magistrado quiere protección absoluta por si Nogueria intenta quitarse la vida o por si algún interno decide tomarse la justicia por su mano, según fuentes penitenciarias consultadas por ABC.

Nogueira a quien se imputan de momento dos delitos de homicidio (por las muertes de su tío Marcos Campos y la esposa de éste Janaina Santos) y dos de asesinato (los dos niños de cuatro y un año) ingresó el viernes a última hora de la noche en la cárcel de Alcalá Meco, tras pasar cinco horas declarando ante el juez. Admitió los hechos parcialmente. Confesó haber matado a toda su familia pero no suscribió el relato de hechos por el que se le interrogó. Ante la Guardia Civil parece que fue más explícito.

Atendiendo a la orden del juez, después de llevar a cabo todos los trámites de ingreso (incluido el examen médico), el joven fue trasladado a la enfermería de la prisión, en concreto a la celda de observación, separada del resto de la estancia por un cristal. En ese habitáculo se cumple la doble exigencia judicial: está protegido de terceros y de sí mismo.

A la vez, se le aplicó el conocido como PPS (Protocolo de Prevención de Suicidios), que entre otras medidas significa asignarle preso de confianza -los llamados «presos sombra»- día y noche. Este interno de confianza puede verlo a través del cristal para alertar de cualquier intento autolítico o similar y además es una medida suficiente de separación del resto de presos que estén en esa zona del centro penitenciario.

La celda de observación de la enfermería es del mismo tipo que la que tuvo nada más ingresar Antonio Ángel Ortiz, el pederasta de Ciudad Lineal, que está siendo juzgado en la Audiencia de Madrid por violar a niñas. Los movimientos del autor del cuádruple crimen estarán por tanto muy restringidos mientras permanezca en esa situación de control extremo.

Pero no es un lugar para permanecer indefinidamente. Por su edad, 19 años a punto de cumplir 20, el brasileño debería pasar después a un módulo de jóvenes (hasta que cumpla los 21). Instituciones Penitenciarias va a solicitar al juez permiso para cambiarlo de centro en cuanto sea posible en lugar de ingresarlo en ese módulo en Alcalá Meco.

La razón es que en el mismo hay en este momento varios miembros de bandas latinas y se considera que eso puede suponer otro riesgo añadido. La imagen de Patrick Nogueira y sus incalificables crímenes han corrido ya de centro en centro. «Ahora te toca a ti», llegó a decirle a su tío tras esperarlo y mostrarle los cadáveres de su mujer y sus hijos.

El sospechoso tenía miedo de las cárceles brasileñas , igual que lo tenía su familia. En cualquier caso deberá permanecer cerca de Guadalajara debido a las diligencias que previsiblemente ordenará el magistrado pronto: examen psiquiátrico forenes y reconstrucción de los hechos, entre otras.

El propio juez, el fiscal y la Guardia Civil convencieron a la hermana y al abogado brasileño del entonces sospechoso para que se entregara. La razón: las «garantías del ordenamiento jurídico español para la instrucción y futuro enjuiciamiento de la causa». Nadie puede permitirse que le ocurra algo entre rejas.