Arenas asegura que «jamás» conoció la caja b y que Lapuerta le dijo que los donativos al PP eran «legales»

«En materia de financiación no tengo ni pasado ni presente porque nunca he tenido ninguna responsabilidad económica», ha explicado Arenas ante las preguntas del portavoz socialista en la comisión, Artemi Rallo, que ha rechazado la afirmación del senador y ha mostrado una carta de Álvaro Pérez «El Bigotes» dirigida a Arenas cuando era secretario general de los populares. El senador ha asegurado no tener conocimiento de la misiva y ha insistido que entre sus atribuciones como dirigente del PP no estaba la de atender los asuntos económicos.

«La gente de mi Secretaría tenía una instruccion directísima: en cuanto llegaba algo económico lo derivaban inmendiatamente a los servicios económicos del partido. Ni autoricé gasto, ni firmé jamás un talón ni tenía nada que ver en los gastos e ingresos del PP. Si el PP tenía caja b jamás la conocí», ha insistido.

Arenas sí que ha admitido que cobraba un complemento salarial en concepto de « gastos de representación », y ha explicado que siempre lo obtuvo «mediante transferencia bancaria». «Jamás he recibido un euro de ninguna actividad económica que no sea fruto de mi trabajo personal, nunca he tenido un negocio, no me he lucrado de la política, y todo lo que he recibido lo he declarado a Hacienda», ha reiterado.

También se ha detenido el es secretario general del PP en su relación con el extesorero de los populares Álvaro Lapuerta, del que aseguró que le explicó que el partido recibía «donaciones anónimas legales». « Yo al único tesorero que conocí es a Álvaro Lapuerta . Era una persona mayor que nosotros y repetada, y me dijo que este partido se nutre de subvenciones públicas, de cuotas de militantes y de cargos públicos, y de donativos anónimos legales y jamás a cambio de una contraprestación».

Tras la comparecencia de Arenas le ha tocado el turno a Pío García-Escudero. Las preguntas al presidente del Senado han versado sobre dos cuestiones principales: los sueldos que percibió del PP, en etapas en las que ya cobraba un salario como cargo público, y la actividad económica de la Fundación para el Desarrollo Económico y Social de la Comunidad Autónoma de Madrid, Fundescam.

«Me persigue como un mantra», ha asegurado García-Escudero en referencia a los sobresueldos que presuntamente había cobrado del PP. «Yo, como portavoz del grupo del PP en el Senado, como coordinador de Organización y luego otra vez como portavoz, tenía una retribución salarial por tener un cargo público: 14 pagas anuales, recibidas en transferencia bancaria, con su retención fiscal y declarada a Hacienda. Además, el PP, por pertenencia a órganos de relevancia, también me pagaba un sueldo, en 14 pagas mensuales, fiscalizadas, con declaración a Hacienda... Todo legal, todo transparente. No hubo ningún tipo de sobresueldo , lo que hubo fue una retribución legal y transparente», ha insistido.

Sobre su gestión al mando de Fundescam , figura relevante en la trama Púnica, en cuya instrucción varios empresarios han reconocido haber facturado para la fundación servicios que en realidad prestaban al PP, el presidente del Senado ha explicado que sus atribuciones no tenían nada que ver con la contabilidad: «Yo no bajaba a la gestión diaria de Fundescam», ha insistido.

También ha rechazado los dos apuntes que lo señalan en los papeles de Bárcenas: «Son falsos. Yo he cobrado retribuciones salariales legales y transparentes», ha zanjado.