La reforma de la Constitución que Zapatero nunca realizó

Sánchez vuelve así al discurso que hace 11 años mantuvo el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero . Allá por 2004, el ex secretario general socialista decía tener la «voluntad de responder a la decisión de los españoles». En el discurso de investidura de su primer mandato, prometió, al igual que Sánchez pretende hoy, reformar la Constitución.

Entre ellas se encontraba la propuesta de reformar el Senado, algo que calificaba como «imprescindible» y que, finalmente no acabó haciendo. Lo mismo pasó con la medida destinada a evitar la discriminación de la mujer en el orden de sucesión de la Cor ona. Aunque a esta promesa añadió la premisa de que no alterase «las previsiones que afectan al Príncipe de Asturias», el entonces presidente no revocó la Ley Sálica.

Otras de las promesas hechas por Zapatero en sus primeros días de Gobierno fueron la «liberalización» de RTVE, la revisión del Plan Hidrológico Nacional o la consagración de la denominación oficial de las 17 Comunidades.

No eran cambios sencillos de abordar. La reforma para la no discriminación de la mujer en el acceso a la Jefatura del Estado debía ser apoyada por dos tercios de la Cámara, disolver después las Cortes, convocar nuevas elecciones y celebrar un referéndum. Y esto fue algo, que en ese momento, resultaba imposible de lograr. Un proceso complejo que no se abordó. La fragmentación parlamentaria esperada en las próximas elecciones generales se lo pondrá aún más difícil al PSOE de Pedro Sánchez.

La única reforma que Zapatero abordó es una que no prometió: la modificación del artículo 135 . En 2011, en un momento de máxima emergencia económica, el expresidente buscó el apoyo del entonces líder de la oposición, Mariano Rajoy, para blindar constitucionalmente el principio de estabilidad presupuestaria y marcar como prioridad el pago de la deuda .

Ahora que la economía se recupera, el actual secretario general del PSOE quiere revocarla porque el Gobierno de Rajoy la ha usado a modo de «excusa» para «amparar» los recortes en materias como sanidad o educación. Pedro Sánchez, que «está dispuesto a reconocer y corregir el error», votó a favor de esta reforma exprés de la Carta Magna.