Más de veinte ministros han dimitido desde que se reinstauró la Democracia

La lista la estrenó el almirante Gabriel Pita da Veiga, que dimitió en 1977 disconforme con la decisión de Suárez de legalizar el PCE. También adoptaron esta decisión los vicepresidentes económicos: Enrique Fuentes Quintana (1978) y Fernando Abril Martorell (1980). El sucesor de Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo, aceptó la retirada voluntaria de Francisco Fernández Ordóñez, como ministro de Justicia, y de José Luis Álvarez como responsable de Agricultura.

El Gobierno de Felipe González fue el que más casos afrontó, durante sus trece años de existencia: Diez ministros. La nómina se abrió con Miguel Boyer, que renunció en 1985. La dimisión más sorprendente fue la del todopoderoso vicepresidente Alfonso Guerra, en 1991. Lo hizo un sábado a última hora de la tarde, en un acto público a priori sin trascendencia. Estaba demasiado quemado por los escándalos de su hermano Juan.

Julián García Valverde renunció a ser ministro de Sanidad en 1992 por un escándalo financiero, relacionado con la venta irregular, por parte de Renfe, de unos terrenos en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes cuando él era presidente de esa compañía. En 1992 abandonó la cartera de Exteriores Francisco Fernández Ordóñez, por culpa de un cáncer que le llevaría a la muerte. Un año después presentó su dimisión el titular de Interior José Luis Corcuera, después de que el Tribunal Constitucional declarara inconstitucionales dos apartados de la Ley de Seguridad Ciudadana.

Le sucedió en el cargo Antoni Asunción, quien dimitió apenas un año después por coherencia, al asumir su responsabilidad política en la huida del ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán. Vicente Albero dejó la cartera de Agricultura en 1994 tras conocerse que en 1984 no había declarado a Hacienda 20 millones de las antiguas pesetas. Tras el escándalo de las escuchas telefónicas del Cesid, en junio de 1995, González aceptó las dimisiones del vicepresidente, Narcis Serra, y el ministro de Defensa, Julián García Vargas. Antes, en 1990, Manuel Chaves abandonó el Ministerio de Trabajo para presentarse como candidato a la Junta de Andalucía

Ya con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en 2009 presentó su dimisión el ministro de Justicia Mariano Fernández Bermejo, después de que su cacería con el magistrado Baltasar Garzón, que acababa de iniciar la investigación por el caso Gürtel, abriera las puertas al escándalo. También dimitieron, José Bono, que renunció como ministro de Defensa en 2006 por motivos personales, así como José Montilla y Juan Fernando López Aguilar para presentarse como candidatos a la Generalitat de Cataluña y al Gobierno de Canarias, respectivamente

El Gobierno de José María Aznar tampoco se ha librado de la renuncia de algunos de sus ministros. Cuatro en total. Por ejemplo, el titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Manuel Pimentel, forzado después de conocerse que la esposa del hasta entonces director general de Migraciones era propietaria de una empresa de formación que obtuvo fondos públicos. El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, se retiró de la política por razones de salud, y el de Defensa, Eduardo Serra, renunció a continuar en la siguiente legislatura.

Durante el segundo mandato de Aznar dimitió de su puesto el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, para presentarse como candidato del PP a la presidencia de Baleares en las autonómicas de mayo del 2003. El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, es la primera dimisión del Gobierno de Mariano Rajoy y la última, de momento, desde que se reinstaturó la Democracia.