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El presidente de la Generalitat, Artur Mas, antes de comparecer ante los medios - INES BAUCELLS

Los «deberes» soberanistas de Artur Mas

En septiembre, el presidente de la Generalitat tendrá que aclarar las últimas incógnitas sobre la consulta del 9 de noviembre

s. montero
Actualizado:

En septiembre, el presidente de la Generalitat tendrá que aclarar las últimas incógnitas sobre la consulta del 9 de noviembre

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  1. La celebración de la consulta, en jaque

    El presidente de la Generalitat, Artur Mas, antes de comparecer ante los medios - INES BAUCELLS

    Tras pasar unos días en Menorca , el presidente de la Generalitat, Artur Mas, volverá a Cataluña para diseñar los últimos detalles de la consulta soberanista del 9 de noviembre.

    Con escepticismo entre sus propias filas y una Diada que amenaza con desinflarse, el líder catalán tendrá que superar varios escollos si quiere mantener la consulta en la fecha establecida. Una situación que parece poco probable. Incluso, la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, ya dejó la puerta abierta a un posible aplazamiento de la fecha.

    Esto son algunas de las cuestiones con las que tendrá que lidiar Artur Mas en el próximo mes.

  2. Aprobar en septiembre la ley de consultas

    El líder de ERC, Oriol Junqueras, durante la sesión de control al Gobierno catalán - efe

    El pleno del parlamento catalán deberá aprobar la ley de consultas que permitirá a Mas convocar la cita del 9 de noviembre. El 16 de julio ya se dio luz verde al proyecto en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament, pero deberá llevarse al pleno en septiembre para ser votada tras pasar por el Consejo de Garantías Estatutarias.

    Esta Ley fue diseñada como herramienta consultiva después de que el Congreso de los Diputados se negase a traspasar la competencia de convocatoria de referéndums a Cataluña.

    El texto fue aprobada en la citada comisión por 17 votos a favor (CiU, ERC, PSC, ICV-EUiA y CUP) y cuatro en contra (PPC y Ciutadans).

  3. El dictamen del Tribunal Constitucional

    Joana Ortega y Artur Mas - inés baucells

    Mas amenazó el pasado 30 de julio con pasar a una «última fase» de la hoja de ruta secesionista si la consulta es anulada por el Constitucional. Ante esta posibilidad, la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, dejó abierta al aplazamiento de la cita electoral. Sin embargo, el presidente de la Generalitat no ha querido desvelar ninguna acción concreta ante esta posibilidad.

    Sin embargo, esta posibilidad plantearía un nuevo quebradero de cabeza a Artur Mas, mientras su socio de partido en Ciu, Unión Democrática de Cataluña, es partidaria de no realizar una consulta ilegal, ERC presiona para que se celebre bajo cualquier circunstancia.

    El líder de ERC, Oriol Junqueras, pidió en un artículo en el diario l Punt Avui que se desobedezca al Tribunal Constitucional si no avala la consulta. «Ya sabemos cómo las gastan; respetuosamente, el Tribunal Constitucional que diga lo que quiera», escribía el dirigente catalán en el diario.

  4. ¿Y si no se celebra?

    Oriol Junqueras charla con una compañera en el parlamento catalán - efe

    Si finalmente no se celebra la consulta el 9 de noviembre, se abre un abanico de posibilidades, aunque ningún líder quiere hablar abiertamente de ello. Adelantar las elecciones autonómicas podría ser una posible solución tras el fracaso del proyecto secesionista catalán.

    Los sondeos indican que en el caso de producirse, ERC podría alzarse con la victoria electoral.

  5. La desunión

    El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, conversa con el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, y el presidente catalán, Artur Mas - efe

    La salida de la secretaría general de CIU por parte de Josep Antoni Duran i Lleida ya evidenció la grieta que existía en la coalición formada por CDC y UCD. De hecho, Duran está preparando un movimiento centrista para este otoño. El que antaño fuera socio de Mas puede convertirse en los próximos emses en un enérgico rival.

    La presión de su socio parlamentario, ERC también se hace patente a medida que se acerca la fecha de la consulta para forzar que la convoque suceda lo que suceda en las próximas semanas. Mientras, el PSC continúa en la ambigüedad, aunque su líder Miquel Iceta no apoyará una consulta ilegal.

  6. Las 23 propuestas de Mas a Rajoy

    Reunión de Mariano Rajoy y Artur Mas en el Palacio de la Moncloa - ignacio gil

    En los próximos meses también se verá si el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, accede a colaborar en alguna de las 23 propuestas que Artur Mas le entregó en Moncloa durante su reunión el pasado 30 de julio.

    Rajoy no dará prioridad al estudio de estas sugerencias y por supuesto, no lo vinculará al calendario nacionalista ni a la consulta. El Ejecutivo español no se ha comprometido a nada con el catalán.

    Las sugerencias de Mas a Rajoy tocan palos tan dispares como la inversión en infraestructuras, la anulación de la ley de Educación LOMCE por el cual se obliga a la Generalitat a financiar el coste de escolarización en castellano en un centro privado o la amplicación del déficit para 2015.

  7. La Diada como medida

    Imagen de archivo de varias personas que participan en la cadena humana por la independencia - efe

    La celebración de la Diada el 11 de septiembre será un buen acontecimiento para tomarle el pulso al desafío independentista. El caso Pujol o la marcha de Duran i Lleida de CiU podrían desinflar la convocatoria y acabar con el impulso del proyecto catalanista.

    Por el momento, la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural estiman que las inscripciones se sitúan en torno a las 115.000, una cifra que supondría una reducción de la asistencia en un 60% .