Las Cortes trasladan a Chaves y Griñán los autos de preimputación de la juez Alaya

Posadas se ha limitado a certificar que se ha «ejecutado» el trámite que corresponde, y a recordar que «cuando las cosas se hacen por el procedimiento correcto, se hacen con toda rapidez. Si es erróneo no puede hacerse».

El máximo representante de la Cámara Baja se refería así al hecho de que la participación de las Cortes se ha producido finalmente después de que la juez de Sevilla dictara un auto en el que pedía tanto al Supremo como al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que la «auxilien» para notificar el citado auto a Chaves, -también al expresidente andaluz José Antonio Griñán a través del Senado-, así como a cinco exconsejeros, todos ellos aforados. Lo hacía después de que las Mesas del Congreso y del Senado acordaran devolver a la magistrada los requerimientos expedidos a tal efecto y presentados por la Guardia Civil.

La juez explicaba en la resolución llegada al alto tribunal, con fecha de 8 de abril, que ambos oficios iban dirigidos a sus respectivos presidentes -Jesús Posada, del Congreso, y Pío García Escudero, del Senado- «con el ruego de que hicieran llegar el contenido del mencionado auto -el cual iba en sobre cerrado- a los diputados y senador referidos en el mismo, al ser estas Cámaras domicilios laborales de estas personas».

Las Mesas del Congreso y del Senado acordaron el pasado martes devolver a la juez Mercedes Alaya la documentación remitida relativas a los diputados Manuel Chaves y José Antonio Griñán y al senador socialista José Antonio Griñán y advirtieron a la magistrada que no había optado por el «camino correcto» para trasladarla a los afectados porque el órgano jurisdiccional para relacionarse con aforados es el Tribunal Supremo.

Por su parte, en los pasillos del Congreso, Manuel Chaves ha confirmado haber recibido el escrito que le afecta subrayando que esta vez la notificación se ha enviado «por el cauce legal correcto». Ha declinado comentar si la juez ha podido o no incurrir en prevaricación o si debe ser sancionado, pero sí ha reiterado que este episodio ha sido «muy burdo y muy confuso».