Bildu busca hacer «cuña» con Cataluña ante un «Estado que se cae a trozos»
Los radicales reiteran al PNV su oferta de pacto para imitar a Artur Mas en Cataluña en su órdago al Gobierno de Rajoy
Bildu insiste en jugar a ser ERC en el País Vasco y ofrece su apoyo parlamentario al Gobierno del PNV para que apueste de forma decidida y unilateral por la independencia tal y como está haciendo Artur Mas en Cataluña . Tras diez meses ... de legislatura, el presidente de Sortu, Hasier Arraiz, se estrenó ayer como orador en la tribuna del Parlamento Vasco –solo antes sentado desde su escaño se dejó oír gritando «¡fascista!» al popular Borja Sémper - para exponer la «vía vasca» de Bildu hacia la soberanía de «Euskal Herria», que debe seguir la estela de los «los países catalanes», mucho más «audaz» a su juicio que la ruta seguida hasta el momento por el PNV.
Al Gobierno de Iñigo Urkullu se dirigió el líder de Sortu para reiterarle su oferta de convertirse en socio leal de esta legislatura. «El Gobierno de Urkullu tendrá nuestro apoyo para hacer un camino hacia la soberanía», se ofreció Harraiz, que apostó por que catalanes y vascos independentistas hagan «una cuña democrática» para presionar a España, «un Estado que se cae a trozos», y obligarle a reconocer el supuesto «derecho a decidir» de ambas regiones.
«Ésta es nuestra propuesta (...) No es una propuesta maximalista, no es todo o nada. Es empezar por acuerdos pequeños», dijo el de Sortu, que añadió que «no hay duda de que Escocia y Cataluña son un ejemplo» para el País Vasco.
Aliados
El PNV, que ha dejado clara su voluntad de lograr un nuevo estatuto para el País Vasco que debería someterse a referéndum antes de 2020 –en su programa electoral habló de 2015-, le replicó por boca de su portavoz, Joseba Egibar, que pretende consensuar con Bildu «y con todos los demás grupos» la fórmula para ejercitar ese derecho a autodeterminarse.
Sin mayores urgencias de apoyo parlamentario, tras haber alcanzado el PNV un amplio acuerdo fiscal y económico con el PSE y el PP, Egibar sin embargo dejó claro que los fines les unen a la «izquierda abertzale» y que terminarán por encontrarse en el mismo camino: «Estas dos fuerzas políticas no pueden hacerse daño en esta estrategia; porque no acertaremos».
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