Las amantes de los camorristas, a ritmo de samba
La exnovia del capo Polverino y su hermana acudieron a un programa de Telecinco en abril
Las amantes de los camorristas, a ritmo de samba
Kelen Barbosa da Silva , brasileña, es la madre del último hijo del capo de la Camorra Giuseppe Polverino, un pequeño de cinco años, que vive con su madre en El Vendrell (Tarragona). Kelen hace tiempo que no es pareja del mafioso, ... pero él sigue corriendo con los gastos y ella es titular de una sociedad instrumental «Construcciones Kelen» , utilizada por la organización para el blanqueo de dinero. Recibe además una asignación mensual y coches como regalo. El martes fue detenida por la Guardia Civil en su casa. Figuraba desde el principio en la lista de objetivos de la Fiscalía Anticorrupción y, por tanto, era seguida de cerca, con más o menos intensidad.
La sorpresa de los investigadores llegó cuando el pasado abril la perdieron de vista. No estaba en su chalé. La brasileña había cambiado su casa en ese momento por la televisión. Con los ojos como platos, l os agentes la vieron bailando samba, en el programa de Telecinco «Mujeres y hombres y viceversa» en el que su hermana Adriana aspiraba como «tronista» a conquistar el corazón del candidato masculino. Kelen había ido a apoyarla y no se lo pensó cuando la requirieron del plató. La explosiva Adriana y su algo más contenida hermana demostraron sus dotes para el baile.
Kelen Barbosa fue la persona que utilizó Giuseppe Polverino para darle cobertura durante la primera parte de su estancia en España. Ella asumió el control de las viviendas donde se refugiaron los camorristas más relevantes . A Kelen le constan varios domicilios, además del chalé en el que vive. Y está vinculada a otras dos viviendas en El Vendrell. El titular de una es el miembro de la organización Armando Chiaro, utilizado para enmascarar patrimonio; la segunda pertenece a Pasquale di Maro, también socio mafioso.
La hermana de Kelen, Adriana Barbosa también fue arrestada el martes, aunque para los investigadores esta última, que trabaja para una agencia de Barcelona, se aprovechaba del dinero que llegaba de los mafiosos y no pertenecía a la organización como tal, de ahí que haya quedado en libertad. Kelen, en cambio, que también hablaba por teléfono con Palma Polverino la hija de Polverino (la que tiene con su exesposa italiana), tiene el horizante penal más complicado. En una conversación Polverino llegó a quejarse de que estaba harto de mantener a tanta gente: a Kelen y a su hijo, a Adriana y a la madre de ambas. No se sabe con certeza si por ese hartazgo o a iniciativa de la propia Adriana, ésta mantuvo también una breve relación con otro de los hombres más buscados del clan Polverino: Giuseppe Ruggiero , actualmente desaparecido y mano derecha del jefe. Con estas relaciones todo quedó en familia y el dinero, bajo control.
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