Con Francisco Rodríguez fuera de juego por obra y gracia de la diligencia forzada de Ferraz tras su implicación en «Pokemon», los barones del PSOE gallego están dejando solo a « Pachi » Vázquez en su campaña en Galicia.
La frialdad que dibujan los escenarios a los que el de O Carballiño, incluso acompañado de Alfredo Pérez Rubalcaba, se sube durante estos quince días, reflejan la desmovilización popular a la que está abocada la campaña del socialista, pero la apatía no está solo en la grada, los barones socialistas no están con «Pachi» o lo están, pero a medio gas.
Abel Caballero se ha prestado a salir en la foto, pero ya. La evidente animadversión política del orgullo del socialismo gallego, —alcalde omnipotente de una de las dos principales ciudades de la comunidad— no se corresponde con el apoyo explícito que el principal granero de votos para el PSdeG ( 50.000 votos en 2011, 6.000 más que en los anteriores comicios municipales, siendo las de 2011 las elecciones en las que el PP borró del mapa al PSdeG en la práctica totalidad de ayuntamientos españoles) debería en consecuencia prestar a la campaña de «su» candidato.
Desde Vigo, una sonrisa
Caballero no ha intervenido en mitin alguno. Sigue, eso sí, haciendo soflamas incendiarias contra el presunto abandono de la Xunta de Feijóo a Vigo, pero no hay en la hemeroteca una sola frase dando su apoyo explícito al candidato socialista a presidir la Xunta. Ayer lunes acompañaba al candidato en un acto de Igualdad en el que volvió a no dar una declaración pro-campaña. Hasta la fecha, lo único que ha brindado a su rival político fue la sonrisa de la pegada de carteles en Vigo.
Blanco no participa en la campaña con Vázquez y tiene su propio argumentario
Ha mencionado a Pemex, pero nunca con tanta contundencia como para negar la existencia de los contratos. No se ha mojado con promesas específicas y se ha dedicado a dar titulares diferentes a los de «Pachi». Eso sí, fue uno de los principales asesores del líder de los socialistas antes de los debates, pese a que en esa ocasión también trató de no salir en la foto.
Desde Lugo, Xosé López Orozco solo ha salido a la palestra para hablar de sí mismo y de sus ansias de colaboración con la Justicia en caso de que le salpique alguna de las derivadas de «Pokemon». El otrora soporte incondicional de Vázquez puso argumentario a la gallega antes de las frustradas primarias: « Ojalá se presenten muchos candidatos» y declinó una y otra vez decantarse por alguno de los posibles aspirantes, sin ocultar su aprecio por José Blanco, a todas luces su favorito para estar hoy en el sitio que sin embargo ocupa «Pachi».
Bastión del socialismo gallego, tanto por su cargo, como por su categoría de miembro nato de la ejecutiva, ha brillado por su ausencia hasta la fecha en campaña. Acompañó a Rubalcaba en el mitin de Villalba, junto al presidente de la Diputación de Lugo, Xosé Ramón Gómez Besteiro, otro de los que sonaron para sustituir a Vázquez al frente de la candidatura, y que no está en campaña. O lo está, pero lejos de los actos centrales, como ayer mismo, que repartía folletos del partido en Lugo junto a la secretaria de política social del PSOE y exministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. Las declaraciones las hizo esta, y no el barón gallego.
Con Touriño sí estuvieron
La excepción a la regla la pone Francisco Caamaño. Pese a protagonizar el más mediático de los enfrentamientos de precampaña, el de Cee se está volcando en el apoyo al candidato socialista, tanto presencialmente como en redes sociales, donde el número uno por La Coruña se ha consumado como un irónico y compulsivo «tuitero».
Desde la platea virtual y la real, el exministro de Justicia está apoyando a Vázquez
Al igual que Emilio Pérez Touriño en 2009, Vázquez se ha hecho acompañar por los pesos pesados de su partido en Madrid. Si bien, el expresidente de la Xunta durante los años del bipartito, contaba en cada uno de sus mítines y encuentros con algún representante importante del área que visitaba o bien con alguno de sus escuderos sobre el escenario, algo con lo que Manuel «Pachi» Vázquez no está contando en la actual. Los barones se apartan de «su» candidato.




