El plan político para remontar la natalidad

El programa de los populares en materia de demografía parte del apoyo a la natalidad y a la conciliación familiar para frenar la pérdida de población y su envejecimiento. El PP apuesta por mantener la tarjeta de bienvenida que desde el 1 de enero de 2016 ofrece al 84 por ciento de los padres gallegos 100 euros al mes durante el primer año de vida del bebé para cubrir gastos alimentarios y de farmacia. En el caso de familias con pocos recursos la medida se amplía hasta los 3 años. Además, se acaba de poner en marcha el bono cuidado , que apuesta por un servicio de cuidadores en casos puntuales en los que los padres no se puedan hacer cargo de sus hijos, como enfermedad o una entrevista de trabajo.

También proponen consolidar las «casas niño» que funcionan como guarderías en el rural para que todas las familias puedan conciliar. En este sentido, el programa del PP contempla reconocer la labor de los abuelos en el cuidado de sus nietos y apuesta por una Ley de Impulso Demográfico en Galicia basada en un gran pacto político y social. Además de activar un portal de la conciliación, los populares incorporan otras medidas como la elaboración de una estrategia de apoyo a las familias numerosas, un programa de ayudas específico para núcleos monoparentales y un plan para el tratamiento y la prevención de la violencia filioparental. Además, inciden en la consolidación de las escuelas infantiles de 0 a 3 años en grandes empresas y polígonos industriales de la Comunidad.

El programa de los socialistas gallegos dedica seis páginas a desgranar la sangría demográfica que acucia Galicia. El PSdeG determina que «la estrategia para la revitalización demográfica debe contemplar los índices de fecundidad y la inmigración», pero aporta pocas medidas concretas al respecto. La única propuesta definida de los socialistas para aumentar el número de hijos por mujer partió de su candidato a la Xunta que, en un acto en Lugo, apostó por la creación de 10.000 nuevos puestos de trabajos orientados a los más jóvenes y a los parados de larga duración. El objetivo, apuntó Leiceaga, es convencer a la nuevas generaciones «de que tengan hijos y se queden o retornen a Galicia». También sugieren políticas de conciliación e incentivos (que no se describen) para potenciar la natalidad en la Comunidad. Otra de sus aportaciones pasa por reducir los índices de emigración juvenil y asignar a este ámbito los recursos europeos prometidos.

Desde la formación En Marea consideran que el problema demográfico se debe atacar desde el plano laboral. Por ello, sus medidas se limitan a este ámbito y se centran en la creación de nuevos puestos de trabajo enfocados en los colectivos más jóvenes . Combatir la discriminación femenina y favorecer la «recuperación de los investigadores» son algunas de sus propuestas, que no acaban de perfilar. La estrategia más concreta que plantea En Marea en este ámbito implica promover una red pública de «equipamientos y servicios que faciliten la vida familiar y laboral». En esta línea, abogan por tejer una red de comedores escolares que «se conviertan en un verdadero factor de socialización y conciliación». También contemplan que la necesaria mejora de los índices demográficos solo será posible si «Galicia se convierte en un territorio atractivo para vivir».

Ni las «10 medidas para 100 días» que sintetizan el ideario del BNG para estas autonómicas, ni el programa al completo que los nacionalistas presentaron ayer recogen ningún apartado específico dedicado a la cuestión demográfica . Las medidas de los nacionalistas se limitan a aportar ideas dispersas que hablan de compensar económicamente a los padres y a las madres que reduzcan su jornada laboral para cuidar de sus hijos. Ahondando en este tipo de ayudas, apuestan por proporcionar a las familias una renta durante los periodos de excedencia por el cuidado de los hijos y por ampliar los permisos retribuidos para acompañar a los niños en caso de enfermedad. Más allá de estos planteamientos, el programa redactado por los nacionalistas solo incorpora la puesta en marcha de un «Observatorio Galego da Infancia e da Adolescencia» que no detallan.

La formación naranja centra sus medidas de apoyo a la natalidad en la situación de las trabajadoras autónomas . Mejorar sus condiciones laborales es básico para Ciudadanos, por lo que defienden la eliminación de las cotizaciones si el embarazo es de riesgo y la mejora del sistema de prestaciones y ayudas tanto durante la gestación como en la baja de maternidad. Su idea es utilizar los fondos recaudados por las bonificaciones del 0,1 por ciento relativas a la financiación de las prestaciones por riesgo durante la gestación y por la lactancia natural. Los de Rivera consideran que la lucha contra la despoblación debe partir de una mejora del emprendimiento en el mundo rural, donde inciden en el desarrollo de los servicios. De una forma muy global, y sin entrar en más detalles, también apuestan por retener el talento de los jóvenes para combatir el envejecimiento.