El Gobierno descarta que Portugal e Irlanda arrastren a España

No existe «ninguna razón» que lleve a pensar que la situación en España vaya a ser distinta en el caso de que la Unión Europea lance un rescate paralelo a Irlanda y Portugal, ha asegurado Elena Salgado, que se ha mostrado partidaria de prestar «la máxima ayuda» a ambos países. La ministra ha apuntado que «en absoluto» se puede considerar el rescate de ambos países como «inevitable» y ha aconsejado esperar a que esta tarde el Eurogrupo debata el asunto tras escuchar las explicaciones de Irlanda, país al que los titulares de Economía presionarán para que acepte recibir ayuda financiera de la UE. En todo caso, ha querido dejar claro que Portugal va a aprobar la próxima semana sus Presupuestos, según le ha asegurado su homólogo portugués.

«Nosotros adoptamos nuestras medidas en el mes de mayo y las estamos cumpliendo; las cifras de ejecución de los Presupuestos ponen de manifiesto que estamos cumpliendo nuestros objetivos de déficit, las cuentas públicas para 2011 van a ser aprobadas, nuestros ingresos y nuestra economía se están recuperando, aunque más lentamente de lo que nos gustaría», ha destacado la vicepresidenta económica.

Salgado ha negado que Bruselas haya pedido al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, más reformas para diferenciarse de Irlanda y Portugal. «Yo no tengo esa información», ha dicho cuando se le ha planteado esa cuestión. A renglón seguido, ha apuntado que el Ejecutivo está «en permanente relación» con la Comisión Europea que, según ha recalcado, es «plenamente consciente» de que España está cumpliendo un calendario de reformas que está siendo «positivo» para el país.

También el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, ha descartado que la situación de Portugal e Irlanda eleven las dudas sobre España , ya que cuenta con una economía que, «por fortuna», está saliendo de la recesión y tiene un nivel de deuda pública «bastante reducido» en relación con el resto de los Estados europeos.

Gómez ha incidido en que España ha adoptado además «reformas importantes» en el ámbito laboral y financiero, y ahora se dispone a hacerlo en materia de pensiones. No obstante, ha remarcado que la situación que se ha desatado los últimos días en Bruselas no «hace ni más ni menos urgente» la reforma del sistema de pensiones, que desde 1995 cuenta con su propio ámbito de discusión en el Pacto de Toledo. «Carece de sentido el tratar de afrontar un debate importante con prisas», ha incidido.