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La tecnología que enchufa el coche eléctrico al ahorro

Las soluciones V2G, que desarrollan empresas como la norteamericana Nuvve, permite devolver a la red la energía sobrante de los vehículos

Nuvven ha desarrollado un software gracias al cual el usuario, a través de una app, informa con antelación de las horas de recarga de su coche y decide a dónde envía el excedente de energía ABC
Belén Rodrigo

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Desde hace ya unos años que se oye hablar de la tecnología de vehículo a red (V2G) gracias a la cual se abre un nuevo uso de los coches eléctricos. A través de esta solución bidireccional se puede enviar la energía sobrante de vuelta a la red, a un hogar o a un dispositivo. En España, donde estamos a la cola europea en penetración del coche eléctrico (solo por delante de Chequia y Hungría), todavía no está muy expandido este concepto y hasta resulta difícil imaginar todo su potencial cuando hacen falta todavía tantos puntos de recarga. Sin embargo, la empresa norteamericana Nuvve, pionera en tecnología V2G, se está posicionando en el territorio español para estar más aventajado cuando el mercado se abra a este nuevo sistema. «Hace seis años en España no se hablaba del coche eléctrico y ahora ha cambiado, aunque se vive una realidad muy diferente a la de otros países. En Noruega, donde yo vivo, el 90% de los coches nuevos son eléctricos. Todo el mundo sabe que debe moverse hacia esa dirección. Las gasolineras dejarán de funcionar y se necesitarán muchos cargadores», explica Christian Blom, director de Operaciones Europeas en Nuvve.

Para intentar explicar el potencial de la tecnología V2G, Blom recuerda que las fuentes de energía renovables necesitan almacenamiento y que los vehículos eléctricos tienen un sistema de acumulación incorporado. Gracias a la tecnología bidireccional «puedes transmitir la energía de tu vehículo a otro dispositivo», resalta el responsable, quien recuerda además que «también ayuda a regular la energía en la red».

Nuvve ha desarrollado un software que se puede instalar tanto en baterías como en cargadores. A través de una aplicación, el usuario debe informar con antelación en qué horas va a tener el coche cargando y puede decidir a dónde envía el excedente de energía. Los resultados están siendo muy satisfactorios. En Dinamarca, por ejemplo, donde operan hace seis años, se han registrado ahorros de entre 2.500 y 3.000 euros por coche y por año, en los proyectos llevados a cabo con empresas. En otro plan realizado con Galp esta tecnología permitió que diez vehículos eléctricos inyectasen 100MWh de electricidad en la red durante las horas de mayor consumo y la solución permitió el ahorro de hasta 50 euros al mes en la electricidad por coche, sin desgaste adicional de la batería.

«Para llevar a cabo la transición energética son necesarias nuevas soluciones como la de Nuvve. El mercado está cambiando muy rápido y la tecnología V2G está avanzando muy rápido, cada vez hay más gente interesada», indica Blom. Subraya también que la firma ofrece «flexibilidad al cliente, quien elige cuándo necesita su coche listo». Las compañías energéticas, por su parte, también dan el visto bueno porque «es igualmente beneficioso para ellas, ayuda a conseguir el equilibrio que necesita la red. Es un tema de responsabilidad, de ayudar a que el sistema funcione», matiza.

Desde 2012, Nuvve se ha asociado con distintos líderes que desarrollan la tecnología V2G para que puedan utilizar su plataforma. Se han llevado a cabo diferentes proyectos, entre ellos, uno con autobuses escolares en EE.UU. «Estos vehículos se utilizan por la mañana y por la tarde y pasan muchas horas parados, pudiendo vender la energía que almacenan», resaltan desde la firma.

Están trabajando igualmente con proyectos piloto en Alemania y por ahora en España «mostramos el valor de los proyectos que tenemos y queremos participar, cuando abra el mercado, con las empresas de cargadores», explica Blom. «El mercado es nuevo, se mueve rápido y queremos estar en ese cambio», añade. De ahí la importancia de seguir trabajando en que se eliminen las barreras relacionadas con el mercado, la tecnología y los usuarios para allanar el camino para una mayor comercialización y proporcionar una evaluación de la capacidad de los vehículos eléctricos para satisfacer las necesidades de la red.

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